Tijuana (México), 13 jun (EFE).- Cientos de jóvenes se manifestaron este sábado en la explanada de la garita internacional de «El Chaparral», en la ciudad mexicana de Tijuana, frontera con Estados Unidos, con el objetivo de exigir un alto al racismo en el mundo y principalmente en esta zona entre ambos países.
Desde el mediodía, los jóvenes representantes del colectivo «Espacio Migrante» protestaron, mediante mensajes escritos en cartulinas y pancartas, ante los ataques de policías a personas de color en todo el mundo y exigieron paz entre culturas.
«Las vidas negras también importan» fue el mensaje que más se repetía en los mensajes y también era la frase más reproducida por las personas que protestaban, quienes utilizaron distintivos «verde» y «amarillo» para quienes deseaban ser grabados o fotografiados y «naranja» para quienes no lo autorizaban.
El «Black Lives Matter» es un movimiento internacional que demanda justicia para George Floyd, Breonna Taylor, Ahmud Arbery, por citar a algunos afroamericanos que han fallecido a manos de policías en Estados Unidos.
En la protesta en Tijuana se recordó al hombre de origen haitiano que en el mes de enero de 2020 murió asfixiado cuando fue sometido y detenido por agentes de la sección turística de la Policía Municipal de esta ciudad.
Ese incidente se registró durante la mañana del 9 de enero en la Plaza Santa Cecilia, después de que el hombre argumentó tener asma y perdió la respiración mientras un oficial le presionó el pecho para someterlo.
La directora de Espacio Migrante, Paulina Olvera Cañes, comentó sobre ese caso que aún se desconoce el nombre de la víctima y recordó que murió mientras pedía ayuda por la falta de oxígeno, pero contrario a ello los oficiales lo golpearon.
«Hicimos un comunicado para la prensa y nos acercamos con la CEDH (Comisión Estatal de Derechos Humanos) pero a ellos tampoco se les ha dado el nombre, ni los activistas, también desconocemos la identidad de los oficiales y la acción contra ellos», dijo.
Esta protesta, explicó, tuvo como objetivo sumarse a los movimientos estadounidenses en contra del racismo, pero también para evidenciar que en México esto ocurre en contra de haitianos y africanos, muchos de ellos fallecidos en su tránsito por Tapachula.
Denis, un joven haitiano que radica desde hace cuatro años en la ciudad de Tijuana donde estudia Ingeniería Industrial, comentó que «el racismo se da en México pero no se reconoce y eso resulta más peligroso».
Contó que en una ocasión en su escuela, durante un trabajo en equipo, él y tres compañeros más de origen haitiano formaban parte de un grupo de siete estudiantes «pero al entregar el trabajo ya concluido los nombres nuestros (haitianos) no fueron agregados».
Recordó también la muerte de su compatriota y contó que con base a su conocimiento el fallecido solamente estaba tomando el internet gratuito que ofrece la plaza turística, «y ese pudo ser el malestar de los oficiales».
Denis contó a Efe que tiene una esposa y una hija, a quien trata de inculcarle la lucha por los derechos humanos y el no racismo, pues su intención es que la niña crezca en la ciudad de Tijuana con costumbres culturales compartidas.
Los manifestante permanecieron por más de una hora en la explanada de El Chaparral, después caminaron por la Plaza Viva Tijuana hasta la Plaza Santa Cecilia, en el Centro de Tijuana, para realizar una intervención artística.
Algunos, ya en la Santa Cecilia, se recostaron afuera de la Barberia Nelson, lugar donde falleció el haitiano el pasado 9 de enero, y con un gis dibujaron la silueta de la víctima y reiteraron el llamado de no racismo en Tijuana.