Aguascalientes.- Los estudiantes de Medicina de la Universidad Autónoma de Aguascalientes reaccionaron con extremo enojo por el posicionamiento de la Casa de Estudios y la cual se deslindó completamente de su situación, por lo que los universitarios que prestaban su servicio en clínicas y hospitales públicos deberían haber regresado a sus plazas desde el pasado 1 de mayo.
Además, los médicos estudiantes reprobaron la actitud del rector Javier Avelar González, el cual los desconoció como estudiantes de la Casa de Estudios a pesar de que éstos pagan puntualmente sus colegiaturas, que son de las más altas en todas las universidades públicas de México.
Externaron su contrariedad por el posicionamiento de la que consideraban como su Alma Máter que siempre los protegería y afirmaron que la orden para regresarlos a sus plazas, por parte de las autoridades federales, solamente tiene como propósito el de hacerse de una mano de obra barata.
Nos pagan cinco pesos la hora y nos hacen trabajar jornadas que se conocen como ABCD, para tener 24 horas continuas de trabajo en los hospitales y clínicas del sector público, señalaron los estudiantes de Medicina quienes omitieron dar sus nombres por temor a mayores represalias en contra de ellos.
Señalaron que hace una semana fueron convocados, el miércoles y jueves de la semana anterior, a reuniones a las que debían asistir máximo 10 alumnos en cada uno de los grupos y en donde las autoridades universitarias les hicieron firmar cartas en los que ellos se responsabilizaban de este regreso o reincorporación a sus actividades.
Nuestro posicionamiento sigue siendo el mismo ya que de la totalidad de casos de muertes por coronavirus, hasta hace unos cuantos días, la mitad era de médicos y enfermeras del IMSS y los cuales se habían infectado con el virus al atender a sus pacientes.
Hoy la situación cambió diametralmente, pues por una parte las autoridades universitarias nos dejaron solos y por la otra las autoridades de Salud nos obligaron a regresar a nuestras plazas desde el pasado viernes y nadie que se ha pasado en estudio cinco años querrá echar a la borda todo ese tiempo de estudios.