Aguascalientes.- La contingencia sanitaria provocó la saturación del mercado con insumos para la salud pirata, pues las autoridades del ramo consideran que al menos el 80% de productos como cubrebocas, geles desinfectantes, guantes, mascarillas y otros, no cumple con las normas oficiales y es de mala calidad.
El problema no se limita a ese tipo de materiales esenciales o básicos que están teniendo una sobredemanda entre la población para hacer frente a la contingencia, pues también se están ofertando lo mismo respiradores artificiales, cámaras desinfectantes e incluso supuestos uniformes o equipos de bioseguridad de última generación.
En ese sentido, el director de Regulación Sanitaria, Octavio Jiménez Macías, señaló que se debe evitar la compra de la gama de insumos para la salud que se ofrecen a través del Internet y propiamente de las redes sociales, así como los que se venden en tianguis, en la vía pública y en algunos comercios establecidos que están aprovechando la coyuntura, toda vez que cuando menos ocho de cada 10 productos de ese tipo no cuentan con registro y son de pésima calidad.
“De repente a medio mundo le dio por elaborar cubrebocas, gel antibacterial, mascarillas y otro tipo de productos para evitar los contagios, viendo en la fabricación y comercialización una minita de oro, sin embargo, la calidad de los mismos deja mucho que desear, por lo que la gente debe tener mucho cuidado si es que se piensan adquirir, debido a que no ofrecen ninguna garantía de protección”, aseveró.
Aprovechando la escasez y la alta demanda que existe de los insumos para la salud, motivada por la forma en la que está avanzando el problema del coronavirus a nivel local y nacional, a muchas personas, microtalleres de costura e incluso grandes fábricas se les ocurrió la elaboración a granel de cubrebocas y guantes de tela, así como del gel desinfectante que ahora se vende por todas partes, pero les pasó por alto el hecho de que la elaboración de este tipo de insumos debe cumplir ciertas especificaciones y normas sanitarias, de manera que se trata de productos pirata sobre los que no se puede avalar su calidad y el resultado de su uso.
Para evitar sorpresas en la calidad de tales productos, las autoridades sanitarias recomiendan que la compra de ese tipo de insumos se realice directamente en establecimientos del ramo, como es el caso de farmacias y otros negocios con registro para la venta de insumos para la salud.