México, 5 mar (EFE).- Casi 46 de cada 100 asesinatos de mujeres que deben investigarse como feminicidios, crimen que contempla la violencia de género, se catalogan solo como homicidios dolosos, lo que abona a una impunidad de cerca de 97 %, reveló este jueves la asociación Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
En el sexenio de 2012 a 2018, el Gobierno reportó 12.374 homicidios dolosos de mujeres, pero MCCI y CONNECTAS contabilizaron 2.646 que debieron investigarse como feminicidios, por lo que deben sumarse a los 3.056 que sí se registraron de forma oficial, explicó en entrevista con Efe la autora del reporte, Valeria Durán.
«Existe una negación a entender la importancia de acreditar realmente los feminicidios, cómo estos asesinatos comprenden todo un contexto de violencia de género, que son mujeres que en su mayoría fueron asesinadas por su pareja, por gente cercana a ella, o con antecedentes de violencia dentro de sus hogares o relaciones», dijo.
Pese al reconocimiento oficial de estos más de 3.000 feminicidios, solo se abrieron 2.444 carpetas de investigación y se identificaron apenas 1.732 sospechosos, de los que solo 739 recibieron una condena, detalló Durán.
Además, de estos detenidos, 105 recibieron sentencias absolutorias por fallas en el proceso, concluyó MCCI al revisar los documentos oficiales de 18 casos, los únicos que se transparentaron.
«Lo que encontramos fueron realmente casos escalofriantes de cómo los ministerios públicos o las fiscalías violentaron el debido proceso, no respetaron lo que marca el Código Nacional de Procedimientos Penales, lo cual abonó a que se liberaran estos feminicidas», narró Durán.
La investigadora detalló que todos los estados, salvo Campeche y Michoacán, han homologado el mínimo de siete causales que estipula el Código Penal federal para que un asesinato se considere feminicidio.
Estos son signos de violencia sexual, lesiones o mutilaciones, antecedentes de violencia, que haya existido una relación entre la víctima y el victimario, amenazas previas, incomunicación forzada y la exhibición del cuerpo en un lugar público.
Pero, pese a los avances de la ley, MCCI concluyó tras estudiar los expedientes que los fiscales y los jueces no respetan la tipificación.
«Son mujeres que sus cuerpos presentaban rastros de mutilación o rastros de violencia sexual, que fueron asesinadas a golpes, con el uso de arma blanca, asfixiadas, o sea, con causas de muerte realmente extremas», describió Durán.
Aunque los datos corresponden al Gobierno anterior, la activista no percibe muchos cambios en la nueva Administración federal.
El país registró más de 1.000 víctimas de feminicidios en 2019, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), superior al 891 de estos delitos en 2018.
De manera adicional, hubo 2.819 mujeres víctimas de homicidio doloso, cifra mayor a las 2.773 del año anterior.
«Esto no ha cambiado, el subregistro crece, las denuncias por asesinatos violentos de mujeres se siguen registrando diariamente y, principalmente creo que es muy importante entender cómo los medios también tenemos participación en ayudar a este índice de impunidad», aseveró Durán.
Como otro factor, la integrante de MCCI lamentó la polémica intención expresada por el actual fiscal general, Alejandro Gertz, de eliminar la figura de feminicidio para considerarlo como homicidio agravado.