México, 5 mar (EFE).- La Secretaria de Gobernación (Interior) de México, Olga Sánchez Cordero, dijo este jueves que las mujeres mexicanas «están muy enojadas» por los distintos tipos de violencia que sufren y no con el Gobierno mexicano.
«Están enojadas, muy enojadas, por la violencia que sufren en sus familias, en sus centros de trabajo, en su ámbito laboral y en su ámbito privado», dijo la funcionaria en conferencia de prensa.
«Están enojadas por la violencia política, económica, intrafamiliar, la violencia en todos sus ámbitos de su vida privada y pública, por eso están enojadas, no están enojadas con el Gobierno, están enojadas por las violencias que siguen sufriendo», añadió.
Sánchez Cordero junto con ocho mujeres del gabinete del presidente Andrés Manuel López Obrador se posicionaron sobre las marchas y manifestaciones del 7, 8 y 9 de marzo en el marco del Día Internacional de la Mujer.
La funcionaria expuso que dichos «movimientos son en contra de las violencias, en contra de la estructura patriarcal, en contra del machismo, en contra de lo que efectivamente sufren ellas y siguen sufriendo».
Expresó que la deconstrucción que buscan las mujeres «no es solamente un tema de Gobierno, es de la sociedad, de sus patrones, es un tema de todos, ese es el tema, de las escuelas, de la educación, de la cultura, de todos».
«El Gobierno no puede hacerlo todo y menos las violencias. El Gobierno no es violento y el reclamo es las violencias, estamos tratando de prevenir las violencias que sufren».
Tras las limitadas referencias de López Obrador al paro nacional de mujeres del lunes 9 de marzo y sus señalamientos de que se han infiltrado grupos conservadores, las funcionarias salieron al paso de las acusaciones de insensibilidad sobre el mandatario.
López Obrador «es un hombre que entiende el feminismo y que, además, apoya a las mujeres» y para muestra está el gabinete paritario que conformó, el primero en la historia de México, dijo la ministra.
Reconoció el llamado a la acción que han hecho mujeres y organizaciones quienes están convocando a una cadena feminista el 7 de marzo, a una marcha pacífica el 8 y a un paro de actividades el 9 de marzo.
La funcionaria dijo que la movilización y la protesta de mujeres en México y el mundo «es oportuna y necesaria para avanzar en nuestros derechos y libertades, para superar las nefastas prácticas patriarcales y en solidaridad y empatía con las mujeres».
Dijo que las mujeres jóvenes que ahora protagonizan las manifestaciones «son la nueva semilla para dejar atrás y de una vez por todas las experiencias opresivas».
Ante este escenario, Sánchez dijo que desde el Gobierno mexicano «respetamos y garantizamos el pleno ejercicio de la libertad de expresión, asociación y manifestación».
Además, hizo un llamado «para que todas las manifestaciones y eventos que tengan lugar con motivo del Día Internacional de la Mujer se realicen con paz y civilidad».
Sánchez apuntó que la apatía y la omisión frente a las tragedias acaban con la cohesión social; «queremos un México vivo y las legítimas manifestaciones de las mujeres son importantes porque las hace protagonistas de esta transformación».
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), revelan que más de las dos terceras partes de las 46,5 millones de mujeres mayores de 15 años que hay en el país, han sufrido violencia en alguna de sus múltiples manifestaciones a lo largo de su vida.
El paro nacional de mujeres se llevará a cabo el 9 de marzo, un día después del Día Internacional de la Mujer en México, donde en 2019 se registraron 1.006 feminicidios, asesinatos de mujeres por razón de género.