México, 9 mar (EFE).- El Gobierno de México informó este lunes que prepara el hundimiento de tres embarcaciones en desuso frente a las costas del balneario de Manzanillo, en el occidental estado de Colima, Pacífico mexicano, para ayudar a la creación de arrecifes artificiales.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) de México, a través del Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura (Inapesca), en coordinación con la Administración Portuaria Integral (API) y la capitanía de Puerto de Manzanillo, Colima, señaló, mediante un comunicado, que esta acción «permitirá recuperar el ecosistema marino de la región».
El Inapesca recordó que los ecosistemas marinos «se han visto afectados por factores como la intensa actividad costera» y los arrecifes «contribuyen a la recuperación de las poblaciones marinas, ya que se convierten en hábitat y zonas de reproducción».
El proyecto consiste en la creación de arrecifes artificiales mediante el «hundimiento controlado» de tres buques pesqueros en desuso, los cuales fueron donados a la API de Manzanillo por la empresa Martuna.
El Inapesca dijo que esta acción controlada de embarcaciones beneficiará a 13 cooperativas.
«La bahía soporta una intensa actividad pesquera, tanto comercial como deportiva, por lo que el funcionamiento de los arrecifes artificiales como sitio de refugio y reproducción de peces representará un aporte importante para sustentabilidad de la actividad pesquera», se apuntó en el comunicado.
Se explicó que la cercanía con las costas facilita el cumplimiento de actividades de investigación, educación ambiental y con potencial turístico.
El Centro Regional de Investigación Acuícola y Pesquera (CRIAP) del Inapesca, en Manzanillo, tiene programado para finales de marzo el hundimiento de una de las tres embarcaciones y para ello la estructura ha sido sometida a una limpieza y acondicionamiento para dar cumplimiento a los requerimientos establecidos por las secretarías de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y Marina Armada de México.
El instituto precisó que los hundimientos cumplen con todas las medidas ambientales, previendo los materiales y limpieza de los mismos y con un sistema de anclaje que permita mantener las estructuras fijas en el fondo marino y en sitios que no afectarán de manera alguna el ecosistema, concluyó el boletín.