México, 11 mar (EFE).- El Gobierno mexicano descarta un riesgo en las inversiones pero admite que hay cautela ante la crisis internacional por el coronavirus, por lo que incluso contempla ajustes al gasto público, expresó este miércoles Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia de la República.
«Riesgo no, cautela sí. ¿Por qué? Porque el mundo está muy complicado y si en el mundo no hay demanda porque no está saliendo la gente de su casa, no está saliendo a comprar, no está saliendo al cine, no está saliendo de vacaciones porque tiene miedo y ese miedo nos lleva (a la cautela)», indicó el jefe de Gabinete.
El funcionario federal reiteró que México está en «una emergencia», como lo declaró por primera vez la semana pasada, en el sentido que los ciudadanos y el Gobierno deben estar unidos para afrontar el COVID-19, que ha dejado siete contagiados oficiales en el país.
Argumentó que el Gobierno no puede controlar coyunturas internacionales, como el esparcimiento del coronavirus y el conflicto internacional del petróleo, que ha derivado en que el barril de la mezcla mexicana cotizara en 27,4 dólares este martes pese a iniciar el año en 56,67.
Por ello, aseguró que el gabinete económico que él preside contempla opciones para proteger la economía del país.
«El plan B, entre todo, tiene que haber un ajuste en el gasto y tiene que haber más agresividad en la inversión porque este país lo que necesita es inversión y lo que el mundo tiene de sobra es dinero», indicó.
Sin precisar cifras, el jefe de Gabinete aseveró que es posible «recortar un poquito en todos lados».
Por otro lado, reiteró que la crisis internacional representa una oportunidad para que México atraiga cadenas de valor de otros países, por lo que ya han recibido visitas de empresarios chinos en busca de invertir.
«Casi todas las compañías que están en China, están muchas en México, entonces en forma natural están volteando a ver acá. Esas son las más rápidas. Las que no tienen plantas en México están haciendo los estudios y sí ven a México como una área de oportunidad por la logística», afirmó.
Como factores positivos, Romo destacó la próxima ratificación del nuevo tratado comercial de México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
También aseguró que ya está en una etapa «bastante avanzada» el Plan Nacional de Infraestructura que el Gobierno mexicano y el sector empresarial anunciaron en noviembre con 1.600 proyectos.
Aunque reconoció que el «pánico viene con un impacto económico», reiteró que aún es «muy prematuro» realizar pronósticos porque debe analizarse la respuesta de la comunidad internacional.