Washington, 11 mar (EFE News).- Estados Unidos y México han «obstaculizado» y hecho «más difícil» la llegada de inmigrantes desde Centroamérica y otros países, pero no han logrado frenarla, advirtió en Washington Javier Martínez, abogado de la Casa del Migrante en la ciudad mexicana de Saltillo, estado fronterizo de Coahuila.
«La gente sigue llegando», explicó este miércoles Martínez a Efe al referirse tanto a quienes regresan a México mientras esperan una respuesta de las autoridades estadounidenses a su pedido de asilo como a quienes están en tránsito hacia ese país.
«Han hecho que sea más difícil que lleguen, pero no la han frenado», agregó, al referirse a la migración.
En el caso de México, relató, la Guardia Nacional y el Instituto Nacional de Migración han asumido esa labor, al igual que las empresas privadas de autobuses que -afirmó- «no les quieren vender los boletos para viajar» a los migrantes.
Martínez, cuya organización atiende a diario a unos 350 inmigrantes, aludió al impacto del programa «Permanezcan en México», que el Gobierno del presidente Donald Trump podrá seguir aplicando gracias una decisión de la Corte Suprema anunciada este miércoles.
La sentencia de la Corte impide la entrada en vigor del bloqueo parcial del programa ordenado el jueves pasado por un tribunal de apelaciones del Noveno Circuito, con sede en San Francisco (California), que horas después suspendió temporalmente su propia decisión para dar tiempo al Ejecutivo a responder.
«Eso va a hacer que siga aumentando precisamente el trabajo que estamos haciendo», anticipó este jurista, quien explicó que los abogados en Estados Unidos «no se están dando abasto» para atender los casos y la gente está «buscando el apoyo de abogados en México».
Según Martínez, desde que supo de este programa se imaginaba que «Trump decía ‘Va a generar varias cosas, pero no me importa. O sea, que México se las arregle y yo evito que (los migrantes) lleguen aquí'».
«Está diciéndole al Gobierno mexicano ‘Háganse bolas (arréglense) con los migrantes’, y México aceptó. Hubo en México mucha polémica porque decían ‘¿Cómo dejas que el Gobierno de Estados Unidos te imponga esto?’, pero al final lo terminó aceptando», complementó.
Y ya aterrizando sobre la situación de los solicitantes de asilo incluidos en este programa, Martínez señaló que están «totalmente vulnerables» y expuestos a no tener éxito en su petición, lo que consideró «frustrante» para quienes tratan de apoyarlos y hacer las cosas de la manera «más profesional que se pueda hacer».
«Por más que nosotros hagamos, las autoridades tienen una política que no les importa lo que hagamos. Su misión es frenar y obstaculizar las solicitudes de asilo en Estados Unidos y de refugio en México», se quejó.
Martínez alertó que la situación de la Casa del Migrante en Saltillo es de vulnerabilidad, lo que ha llevado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a otorgarle medidas cautelares. «Hemos estado sufriendo últimamente ataques, actos de intimidación», detalló.
Este abogado, cuya organización fue fundada en 2002, denunció que han recibido presiones de «los dos lados».
«Hemos tenido, de hecho, documentados casos de intimidación por parte de la Guardia Nacional y también por parte del crimen organizado», sentenció Martínez, quien ha alertado durante su visita a Washington sobre episodios en los que las autoridades han tomado fotografías de sus instalaciones y de las amenazas que han recibido de parte de grupos al margen de la ley.