México, 5 feb (EFE).- La feria de arte contemporáneo Zona MACO, la más importante de Latinoamérica, dio inicio este miércoles a sus actividades uniendo por primera vez todas sus propuestas en la Semana del Arte para atraer más visitantes.
«Por primera vez estamos haciendo ahora Zona MACO Foto y Salón, que habitualmente se hacían en septiembre, para juntarlo con Zona MACO Diseño y Arte Contemporáneo. de esta manera ofrecemos a los visitantes distintas opciones y juntamos a los públicos que venían en septiembre y en febrero para hacer la Semana del Arte en Ciudad de México», explicó a Efe Zélika García, fundadora de la feria.
Durante cinco días, más de 210 galerías y expositores nacionales e internacionales se reunirán en el Centro Citibanamex de la Ciudad de México para promocionar el coleccionismo y la cultura del arte, en esta fiesta del arte fundada por García, emprendedora y especialista en arte originaria de la norteña ciudad de Monterrey.
La unión hace la fuerza y la emprendedora aseguró que ya está siendo un éxito por lo que a partir de ahora harán las cuatro ediciones de la fiesta siempre en fechas y lugares coincidentes.
«Esperamos que este cambio de juntar las cuatro ferias en la Semana del Arte Zona MACO traiga mayor número de visitantes y más oferta cultural en la Ciudad para que cada vez vengan mas personas del extranjero. Ya vienen muchísimas pero queremos que vengan más», sentenció la experta en arte.
En general, el público en el Centro Citibanamez se percibió este miércoles entusiasmado ante la posibilidad de visitar, comprar y admirar obras de arte de múltiples disciplinas. Lo mismo expresaron los galeristas.
«Creo que es interesante ver como interactúan las cosas cuando se juntan y cada sección está ganando al estar alrededor de otras», explicó a Efe Alma Saladin, de la galería guadalajara90210, partícipe de «La casa de la informalidad», una instalación de la sección Nuevas Propuestas.
En este lugar tan particular cercado con una verja en forma de pequeña cabaña, se pueden ver y comprar prendas de ropa, carteles, objetos decorativos, fotografías o libros.
«Es una instalación colectiva que hicimos entre 10 espacios, de México y algunos de afuera. (…) El objetivo es experimentar y hacer cosas juntos, compartir una estética comun, ideas, etcétera», explicó.
ESPACIO PARA LOS INVISIBILIZADOS
«(Esta unión) Es algo positivo ya que yo creo que permite ver qué tan multifacética pueden ser el arte y la creatividad», dijo a Efe Denisse Ariana Pérez, fotógrafa que presentó la exposición «Albinism, Albinism: An Exploration of Light, Nature and Albinism in East Africa».
La artista de origen puertorriqueño y residente en Copenhague trae una de las propuestas que pretenden hacer visibles a colectivos tradicionalmente invisibilizados, en este caso las personas africanas con albinismo.
Pérez acudió primero a Tanzania, donde descubrió la historia de secuestros, homicidios y persecución que sufren las personas con este grupo de enfermedades hereditarias. Posteriormente viajó a Uganda donde, aunque no son tan discriminados, no están contemplados como personas con discapacidad por lo que no reciben la atención sanitaria necesaria.
«Mi trabajo para mí es una combinación entre lo artístico y lo periodístico. Creo que los dos mundos pueden encontrarse y, a través de la estética, contar historias que no son reconocidas porque se ven demasiado informativas», detalló la fotógrafa.
Otro de los proyectos que tratan de dar espacio a personas que históricamente han sido relegadas a un segundo plano es el espacio asignado a la galería Eclectic, ubicada en San Cristóbal de las Casas, en el sureño estado de Chiapas, y que impulsa la venta y exposición de productos principalmente textiles creados por artesanos chiapanecos.
«Para nosotros como artesanos es muy importante que nos hayan invitado a venir aquí a mostrar y vender nuestros productos. También es importante para nuestras familias. Esto es para que todas las personas de la familia que trabajan con nosotros apoyándonos puedan tener mucho trabajo, mucho éxito y que puedan vender muchos de sus trabajos», dijo a Efe el artesano Oliverio Gómez Pérez.
Oliverio hace blusas de lino bordadas a mano desde que a los 7 años su madre Juliana le enseñó el oficio. Y sabe mejor que nadie que la razón de los precios de sus productos es lo laborioso que es hacerlos.
«Lo especial es el trabajo que hacemos es la mano de obra. Otros dicen que es muy caro sin saber lo que el artesano hace lleva mucho tiempo. Una blusa económica me lleva un mes y medio y las más finas y bonitas me llevan dos meses o tres. Hay personas que nos quieren pagar muy barato y para nosotros no es justo», terminó.
La feria comenzó el 4 de febrero con «performances» en la sede principal y cerrará sus actividades el 9 de febrero.
Mientras esta feria se lleve a cabo, simultáneamente también se desarrollarán la Material Art Fair, de arte independiente, y el Salón ACME, un salón de arte que impulsa nuevas propuestas mexicanas.