Pachuca (México) 13 feb (EFE).- A los 36 años, el argentino Rubens Sambueza se mueve por la cancha con un aura de eternidad, es el motor del medio campo del Pachuca del fútbol mexicano y no ve nada raro en su insistencia en burlar el tiempo.
«Creo que pasa más por la motivación. Se pueden tener o no muchos años, pero la exigencia mental tiene que ser la misma de cuando uno debutó, de esa forma se trazan las metas. Yo siempre me entrego, porque la actitud de ir para adelante es una identidad, además de no bajar los brazos», aseguró este miércoles en entrevista a EFE.
Sambueza que ha cumplido 21 partidos on los Tuzos, potencializa su condición física y acepta que pasa más por lo mental, que por el cansancio que pueda llegar a sentir. El volante, jugador del Pachuca desde agosto de 2019, confesó que no ha olvidado los valores que aprendió en Argentina, en las inferiores de River Plate, en las que se ponderaba el trabajo colectivo y el respeto.
«Son cosas que no se olvidan ya que se debe tener un respeto por los compañeros en un deporte de conjunto como este. Si yo no corro y mis compañeros sí, entonces estoy haciendo mal las cosas, no es pretexto ser el mayor del plantel, al contrario, es una forma de corresponder a su confianza», explicó.
A pesar de su aporte, el Pachuca tiene problemas en el Clausura 2020 pues se encuentra en la penúltima posición de la tabla. Sambueza entiende que las cosas tienen que apurarse para que encuentren un mejor funcionamiento bajo el mando en el banquillo de Paulo Pezzolano.
«Depende de nosotros. Pachuca tiene dos torneos sin clasificar a la liguilla, es mucho tiempo para una institución que pelea por la trascendencia, sin embargo, la competencia es feroz, hay equipos fuertes y nosotros no tenemos los grandes planteles de otros, pero creo en la actitud y el sacrificio de mis compañeros para cambiar esto», señaló.
El centrocampista comentó que uno de sus ideales sería retirarse en el América, equipo con el que consiguió títulos en México del 2013 al 2017 y marcó gran parte de su carrera como futbolista.
«Estoy agradecido, particularmente con el América, fue un equipo pauta en mi vida, porque viví una etapa linda con cuatro campeonatos en cuatro años y aunque parezcan pocos, es muy difícil mantenerse en ese equipo con la presión que encierra y sobre todo ganar. Para mí fue la etapa gloriosa de mi trayectoria», reconoció.
En su reflexión América acapara su pensamiento, también porque en el 2013 se naturalizó como ciudadano mexicano, pero Rubens Sambueza tiene raíces argentinas que le tiran para buscar el punto final en donde comenzó, en River Plate, la otra mitad de su corazón.
«Defiendo al Pachuca ahora con la misma devoción. Tengo pasión por el fútbol. sin embargo, me gustaría retirarme en el América porque me dio un nombre en México, aunque al River Plate me encantaría volver a terminar todo porque ahí nací, me crié en la casa club y me dieron la primera oportunidad», reveló.