Sevilla, 17 feb (EFE).- El mediocentro argentino del Betis Guido Rodríguez, quien llegó en el pasado mercado de invierno procedente del América de México, está experimentando en sus carnes la difícil adaptación al fútbol europeo y, como consecuencia de ello, ya ha salido en fotos de desajustes propios de quien acaba de aterrizar.
Guido Rodríguez, que el próximo abril cumplirá 26 años, llegó el pasado enero al Betis como solución para los problemas defensivos de la medular del conjunto entrenado por Joan Francesc Ferrer ‘Rubi’, quien en reiteradas ocasiones había apostado por un perfil en el que encajaba el juego del centrocampista de Sáenz Peña.
Por ello, la dirección deportiva verdiblanca apostó en firme por su contratación una vez lograda la cesión hasta final de temporada por el Barcelona de Carles Aleñá, el segundo de los refuerzos béticos para su centro del campo para la consecución de los objetivos hasta entonces vigentes, la Copa del Rey y la clasificación europea.
El club bético destacaba que con la llegada del mediocentro, adquiría ‘presencia, contención y distribución en el centro del campo’, mientras que Rubi apuntaba que Guido Rodríguez llegaba en perfectas condiciones de ser alineado después de un 2019 cargado de partidos.
El nueve veces internacional con la albiceleste disputó sus primeros minutos como verdiblanco en la holgada victoria ante la Real Sociedad en el Benito Villamarín (3-0) y fue titular en la eliminación copera ante el Rayo Vallecano, cuando jugó 75 minutos y fue suplido por el delantero Loren Morón.
En los 161 minutos que ha jugado en cuatro partidos, dos de ellos como titular, Guido Rodríguez ha evidenciado la lógica falta de adaptación a un fútbol tan diferente en los que ha militado como el argentino y el mexicano, y fue él mismo el que lo que reconoció en declaraciones a medios del país azteca.
El mediocentro apuntó, entre otras causas, la velocidad a la que se juega en Europa, lo mucho que corre la pelota en campos regados y la rapidez con la que se sale al contragolpe cuando se roba el balón en el centro del campo, aspectos éstos del juego en los que se ha visto sufrir mucho al argentino en sus primeros partidos como bético.
Una de estas jugadas fue la que le costó la tarjeta amarilla en Butarque al cortar un peligroso ataque del delantero danés del Leganés Martin Braithwaite, lo que a la postre hizo que Rubi lo cambiase en descanso para evitar el riesgo de que fuera expulsado.
Sus dos últimas titularidades con Rubi han sido formando en el eje del mediocampo con el internacional portugués, ante el Barcelona de Lionel Messi en el Villamarín (2-3) y ante el Leganés en Butarque, aunque la adaptación de uno y el estado de forma del luso tras una operación de hernia disco-lumbar han hecho que ello no haya dado los resultados perseguidos.
Guido Rodríguez, quien ha firmado por el Betis hasta junio de 2024, se formó en las divisiones inferiores de River Plate, con cuyo primer equipo jugó una quincena de partidos antes de militar cedido en el Defensa y Justicia de su país antes de irse en 2016 a México, donde ha pertenecido al Tijuana durante una temporada y al América desde junio de 2017.
En el Betis, el de Caseros comparte vestuario con los mexicanos Andrés Guardado y Diego Láinez, con quien también coincidió en el América.