Tegucigalpa, 22 ene (EFE).- Al menos 752 inmigrantes hondureños de más de 4.000 que salieron de su país en caravana entre el 14 y 15 de enero hacia Estados Unidos, han sido deportados desde Guatemala y México, informó este miércoles una fuente oficial en Tegucigalpa.
De los 752, hoy llegaron 532 procedentes de México y Guatemala, por vía aérea y terrestre, indicó la Casa Presidencial hondureña en un comunicado.
El resto llegó el martes en dos vuelos de la Policía Federal de México al Aeropuerto José Ramón Villeda Morales, de San Pedro Sula, norte de Honduras.
Entre los deportados hoy figura un «supuesto organizador de la caravana que salió la semana pasada desde San Pedro Sula», según las autoridades hondureñas.
Se trata de Héctor Edgardo Cárcamo, de 29 años, originario de San Pedro Sula, adonde llegó resguardado por elementos de la Guardia Nacional de México y fue requerido por autoridades de su país.
LLEGARÁN MÁS DEPORTADOS
Las autoridades migratorias hondureñas esperan el retorno de al menos 1.900 deportados de México, país al que los inmigrantes del país centroamericano ingresaron de manera ilegal.
Según las autoridades migratorias de Honduras, algunos de los inmigrantes «decidieron retornar de manera voluntaria».
Los retornados por vía terrestre han sido recibidos en el Centro de Atención al Migrante Retornado (CAMR), de Omoa, en el caribeño departamento de Cortés, fronterizo con Guatemala.
Algunos de los deportados desde México, el martes, dijeron a los periodistas en San Pedro Sula que no han desistido en su intento de llegar hasta los Estados Unidos, y que se volverán a ir del país porque en Honduras no pueden conseguir trabajo.
Otros, de los que llegaron hoy, dijeron que el viaje en caravana fue un «fracaso» y le recomendaron a sus compatriotas que tengan intención de irse de manera ilegal, que no lo hagan, por el «sufrimiento» que implica, el riguroso resguardo en las fronteras y el requerimiento de un pasaporte que exigen las autoridades migratorias de México.
El primer grupo de inmigrantes hondureños salió en caravana el día 14 en horas de la noche por el punto aduanero de Corinto, fronterizo con Guatemala.
El segundo, el más numeroso, lo hizo por el punto fronterizo de Agua Caliente, sin que muchos hicieran el registro migratorio en las ventanillas de Honduras y Guatemala.
Los inmigrantes, entre ellos muchas mujeres y niños, se habían concentrado a primeras horas del día 14 en una central de autobuses interurbanos de San Pedro Sula, adonde fueron llegando en pequeños grupos o de manera individual, sin tener claro en principio si la caravana saldría por Corinto o Agua Caliente.