Miami, 25 ene (EFE News).- La detención el viernes del mexicano Medardo Cruz-Ventura en el Condado de Whatcom, en el estado de Washington, ha suscitado las protestas de grupos de a favor de los indocumentados, quienes alegan que el migrante no recibió un trato adecuado.
De acuerdo a un comunicado del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), Cruz-Ventura fue arrestado cerca de la localidad de Everson por «entrar ilegalmente al país», y durante la operación los oficiales debieron romper los vidrios del automóvil en el que se encontraba tras negarse a salir por sus propios medios, tal como se le pidió en inglés y español durante 30 minutos.
Según han señalado grupos a favor de los migrantes como Community to Community Development, los agentes no se dirigieron al mexicano en español, no se identificaron como oficiales federales y usaron un lenguaje intimidatorio mientras el migrante y su esposa trataban de ponerse en contacto con activistas e intérpretes desde el interior del automóvil, informa el diario local Bellingham Herald.
El grupo, cuyos miembros y otros activistas protestaron el viernes delante de una estación de la Patrulla Fronteriza en Ferndale, alegaron que el mexicano nunca se resistió al arresto y que más bien sufrió heridas en la boca y el rostro.
«Cuando las personas se niegan a cumplir órdenes de los agentes, intensifican la situación y este tipo de acciones resultan necesarias», señaló la agente de ICE Nathalie Asher, según recoge el diario.
Cruz-Ventura, que se halla en un centro de procesamiento de ICE en Tacoma y afronta una probable deportación, ha sido arrestado por la Patrulla Fronteriza varias veces y entre los años 2000 y 2012 fue deportado a México en tres ocasiones, de acuerdo a la agencia federal.