Washington, 27 ene (EFE News).- México, Honduras, Guatemala y El Salvador han mejorado su cooperación con Estados Unidos para contener el flujo de migrantes y la situación en la frontera sur «ha mejorado enormemente en el último año», afirmó este lunes el subsecretario interino de Seguridad Nacional, Ken Cuccinelli.
«La Administración Trump ha logrado progresos en materia de inmigración», dijo Cuccinelli en una breve teleconferencia de prensa, en la que destacó que el presidente Donald Trump «ha usado y usa todas las herramientas a su disposición para lidiar con la crisis de seguridad en nuestra frontera sur».
En los últimos años se ha producido un éxodo de centroamericanos que llegaron en números sin precedentes, muchos de ellos como grupos familiares o menores de edad sin la compañía de un familiar adulto, a la frontera de Estados Unidos con México y que, en lugar de intentar el ingreso ilegal al país, se presentaron a las autoridades estadounidenses y solicitaron asilo.
El Gobierno Trump detuvo a decenas de miles de esos migrantes, incluidos miles de menores de edad, y estableció acuerdos con México y Guatemala para que los solicitantes de asilo esperen el resultado de sus trámites en esos países.
Según cifras oficiales, este éxodo alcanzó su punto máximo en mayo de 2019, con 144.116 casos de detención o negativa de permiso para entrar al país, y desde entonces han ido disminuyendo paulatinamente hasta alcanzar los 40.620 registrados en diciembre pasado.
Cuccinnelli recordó que este miércoles se cumple el primer aniversario de la entrada en vigor de los llamados Protocolos de Protección de Migrantes (MPP, en inglés) bajo los cuales los indocumentados deben esperar en México mientras se desarrolla su petición de asilo.
«Cada país y todos los países tienen una obligación de proteger sus fronteras», dijo Cuccinelli. «Es lo que también hacen México y los países centroamericanos. Nosotros estamos comprometidos a ayudar a nuestros vecinos en América Central para la seguridad y la prosperidad económica de su gente».
El funcionario elogió las nuevas medidas adoptadas por México, Honduras, Guatemala y El Salvador para contener el movimiento de migrantes hacia la frontera de Estados Unidos, y mencionó la reciente dispersión de una caravana de migrantes y la detención de uno de sus organizadores.
«Han hecho las cosas a su manera», dijo Cuccinelli refiriéndose a las autoridades centroamericanas. «Nosotros lo habríamos hecho de manera diferente, pero han sido efectivos. Han acelerado los trámites para la repatriación (de las personas deportadas desde EEUU) y han sido tremendamente efectivos para detener las caravanas».
La «actitud agresiva» de las autoridades centroamericanas en materia de seguridad pública en el último año «han tenido un impacto tremendo que contribuye a la seguridad y la estabilidad regional», añadió el funcionario.
Cuccinelli también elogió la colaboración de las autoridades de Brasil en materia de inmigración ya que, según señaló, ese país «se ha convertido en una ruta para gente que viene de afuera de las Américas y viajan después a Estados Unidos».
«Brasil está cooperando con una mejor vigilancia de sus fronteras, y esperamos que pronto harán más expedito el trámite para la repatriación de brasileños llegados ilegalmente a Estados Unidos», dijo.
Según Cuccinnelli, el Gobierno de Trump espera contar con los recursos necesarios para completar 725 kilómetros de valla fronteriza antes de fin de año. El gobierno ha estado en una puja con el Congreso para la asignación de fondos que provendrán de los impuestos pagados por los estadounidenses y estarán dedicados a esta obra.
Durante su campaña electoral en 2016, México prometió que construiría un gran muro a lo largo de los 3.200 kilómetros y que México pagaría por la obra, sin haberlo conseguido.