Ciudad Juárez (México) 9 ene (EFE).- El técnico de los Bravos de Juárez, el argentino Gabriel Caballero, aseveró este jueves que la meta para el Clausura 2020, es sumar más puntos que el anterior torneo, que marcó el debut del equipo en Primera División.
«Queremos hacer algo mejor de lo que se hizo en el Apertura. Si bien hicimos más de lo esperado en cuanto a funcionamiento, creo que nos quedamos cortos en las unidades que cosechamos, debimos haber hecho unos cinco puntos más. Ya conocimos la Liga con nuestro primer torneo y pudimos medir nuestras fuerzas», indicó a EFE.
Los Bravos consiguieron 18 unidades en el concluido Apertura 2019, situación que Caballero se plantea superar junto a sus futbolistas.
Para ello, Caballero trabajó en el receso futbolístico en mejorar algunos aspectos mentales y de estrategia, complementándose con los cuatro refuerzos que pudieron fichar: el uruguayo Martín Rabuñal, el paraguayo William Mendieta y los mexicanos Gael Sandoval y Brian Rubio.
«Ahora hay que tener parámetros, reforzar aspectos en cada línea para hacer una mejor campaña y pelear por la Liguilla. Tenemos que plantear objetivos a corto, mediano y largo plazo y el primero de ellos tiene que ser tres puntos cada fin de semana; a mediano plazo, la Liguilla, después es pensar en el título», señaló.
Juárez está entre las nóminas más bajas del campeonato mexicano y Gabriel Caballero prefiere no enredarse en temas económicos para buscar refuerzos. Entiende que el equipo no tiene un presupuesto amplio y por ende se centra en maximizar lo que tiene a la mano.
«En realidad no me gusta saber ni meterme en cosas económicas. Entendemos cómo funciona el fútbol actual, así que me gusta enfocarme en características de los jugadores, si después la directiva me responde que está muy alto el precio, entonces vamos por una segunda opción y así en lo sucesivo».
Caballero aceptó que es difícil equipararse a equipos como Monterrey, Tigres, América y Cruz Azul que gastan grandes cantidades de dinero en refuerzos y tienen planteles competitivos.
«No es simple encontrar gente de calidad. Es una labor dura para la directiva ajustarse a los montos. Leo, escucho y veo que venden a jugadores por grandes cantidades, ¿cuánto hay de realidad? no lo sé, pero es cierto que los números a veces son altos, hasta superiores a Europa, eso no es lo ideal», concluyó.