México, 12 dic (EFE).- La aplicación Naturalista aprovecha la afición por subir fotos a las redes sociales para proteger la biodiversidad mexicana, una de las más ricas del mundo, al registrar más de 1,7 millones de imágenes y 60.000 usuarios tras seis años de su lanzamiento.
Los ciudadanos han registrado cerca de 32.000 especies en México, muchas de ellas no conocidas, lo que los motiva a conocer la naturaleza para protegerla, expresó este jueves Carlos Galindo, director general de Comunicación de la Ciencia de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio).
«Vivimos en una época difícil en cuanto a los aspectos ambientales. Hay mucho deterioro y la participación de la sociedad es indispensable. Si cada quien hace un poquito, podríamos resolver muchos problemas, y el primer paso es conocer a los seres vivos con los que compartimos la casa», comentó Galindo este jueves en entrevista con Efe.
En México están presentes 70 % de la variedad de plantas y animales del mundo, por lo que ocupa el quinto lugar de los 12 países considerados «megadiversos», según la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) de México.
Además, el país tiene cerca de 110.000 especies de animales y plantas, lo que representa el 10 % del total mundial, según la Conabio.
Sin embargo, al menos 2.606 especies de animales, plantas y hongos están en alguna categoría de riesgo, indica la Semarnat.
Ante esta situación y una «deficiencia» en el presupuesto, la aplicación Naturalista ha permitido a los científicos usar las fotografías ciudadanas para identificar especies en peligro y ayudar a los esfuerzos de conservación de manera más eficiente, señaló Galindo.
«Su información está contribuyendo al conocimiento de la naturaleza de México porque esa información no se queda solamente en la aplicación, sino pasa al Sistema Nacional de Información sobre Biodiversidad», precisó.
La red social, con planes de extenderse por América Latina, se basa en la ciencia ciudadana, un concepto de hace más de 100 años, detalló el científico de la Conabio.
En México, mencionó, un ejemplo clásico es la conservación de la mariposa monarca, en la que voluntarios ayudaron a encontrar la ruta migratoria del insecto.
«Ahora lo que cambia es la tecnología. Ahora tenemos teléfonos inteligentes con muy buenas cámaras, tenemos redes sociales, tenemos Internet, y esto es lo que está haciendo que sea más sencillo, más en tiempo real. Y también tenemos este vicio de tomarnos fotos y de estar enviando», expuso Galindo.
La aplicación también ha contribuido a la toma de decisiones, pues se han desarrollado más de 2.710 proyectos en la plataforma que incluyen inventarios en áreas protegidas federales, estatales, sitios arqueológicos y pueblos mágicos, según Conabio.
También ha servido para identificar vectores de enfermedades, como insectos, y promover el turismo de naturaleza en zonas rurales.