México, 19 dic (EFE).- El Banco de México (Banxico) anunció este jueves su decisión de bajar 0,25 puntos los tipos de interés interbancarios hasta el 7,25 %, desmarcándose de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, que la semana pasada mantuvo sin cambios los tipos.
«La Junta de Gobierno decidió por mayoría disminuir en 25 puntos base el objetivo para el tipo de Interés Interbancario a un día a un nivel de 7,25 %», apuntó el banco central del país en un comunicado.
En su anuncio, el instituto emisor argumentó su decisión por «los menores niveles que registra la inflación general», y anunció que seguirá ajustando su política monetaria para conseguir el objetivo de una inflación del 3 %.
Según explicó el Banxico, un miembro de su Junta de Gobierno, formada por cinco personas, votó por disminuir dicho objetivo a un nivel de 7 %.
El pasado 11 de diciembre, la Fed decidió dejar sin cambios los tipos de interés en el rango de entre el 1,75 % y el 1,5 %, tras llevar a cabo tres rebajas consecutivas, y apuntó a una larga pausa en una señal de confianza en el positivo ejercicio de la economía.
La Junta de Gobierno del Banco de México también explicó en su informe que, durante el cuarto trimestre del año, continuó la desaceleración de la economía mundial «y sus perspectivas de crecimiento se han revisado a la baja».
Ello en un entorno en el que las inflaciones general y subyacente en las principales economías avanzadas se mantienen en niveles reducidos y por debajo de las metas de sus respectivos bancos centrales.
«En este contexto, estas instituciones han mantenido posturas monetarias acomodaticias», explicó.
Positivamente, el instituto emisor mexicano consideró que «algunos riesgos para la economía global se han moderado recientemente ante el acuerdo comercial preliminar alcanzado entre China y Estados Unidos, los resultados electorales en Reino Unido y las señales de estabilización en algunos indicadores prospectivos».
«No obstante, el balance de riesgos para la actividad económica mundial continúa sesgado a la baja», subrayó.
LA SITUACIÓN EN MÉXICO
La institución destacó que «los activos financieros en México y la cotización del peso mostraron un comportamiento positivo», a pesar de la «volatilidad» de los mercados financieros nacionales desatada por las crisis políticas en América Latina.
«En cuanto a los riesgos que pudieran afectar el desempeño de los activos financieros nacionales, persiste la incertidumbre asociada a las perspectivas crediticias para la calificación de la deuda de Pemex (Petróleos Mexicanos) y la soberana, así como un posible contagio proveniente de economías emergentes, principalmente de América Latina», sostuvo.
Asimismo, el Banxico señaló que «el entorno actual sigue presentando riesgos que pudieran afectar las condiciones macroeconómicas del país».
Por ello, apostó por «seguir una política monetaria prudente y firme» y propiciar «un ambiente de confianza y certidumbre para la inversión».
El Banco de México expresó que «se estima que persista la debilidad que ha venido registrando por varios trimestres la actividad económica».
La inflación general en noviembre fue del 2,97 %, en la meta del Banco de México, y según las encuestas más recientes se mantendrá en niveles similares a medio y largo plazo, aunque un tanto superiores al 3 %.
No obstante, persisten riesgos al alza -como podrían ser los aumentos del salario mínimo- y a la baja, como por ejemplo una apreciación del peso mexicano frente al dólar.
«Ante la presencia y posible persistencia de factores que, por su naturaleza, impliquen un riesgo para la inflación y sus expectativas, la política monetaria se ajustará de manera oportuna y firme para lograr la convergencia ordenada y sostenida de ésta a su objetivo de 3 %», concluyó la Junta de Gobierno.