La llama del amor se encendió en sus corazones e intercambiando la promesa de adorarse y respetarse toda la vida, Diego Sánchez y Montserrat Juárez se postraron ante la imagen de San Peregrino Laziosi para ser bendecidos como marido y mujer en presencia de decenas de allegados.
El momento más importante para ambos llegó luego de compartir el hermoso tiempo que duró su noviazgo; ahora una nueva etapa comienza en sus vidas y serán convertidos en esposos como logren recorrerla hasta el final.
En lugares especialmente dispuestos se colocaron los respectivos padres de ambos, quienes con cariño y total consentimiento atestiguaron la unión y elevaron preces pidiendo toda la dicha y felicidad en su matrimonio.