Miami, 29 oct (EFEUSA).- El cantante estadounidense de música regional mexicana Roberto Tapia se estrena en el mariachi con su disco «Por siempre ranchero», que sale a la venta este viernes y que, según a Efe, incluye versiones de éxitos suyos como «Hasta la miel amarga» y «Vamos a darnos un tiempo».
«Ya era hora de que yo me animara con el mariachi. Yo he hecho mi carrera con el regional mexicano y no me había atrevido antes, pero sentí que llegó el momento. Era necesario», afirmó el artista durante una entrevista en Miami.
Esa sensación, asegura, la tuvo en un concurrido bar de Medellín (Colombia) el año pasado, cuando vio a decenas de personas emocionadas cantando música de mariachi.
«Los que estaban conmigo y yo éramos los únicos mexicanos», recordó Tapia y aseguró que había coqueteado con la idea de enfrascarse en este género desde sus inicios.
Aunque nació en San Diego (EE.UU.), este chicano especializado en los estilos de Banda y Norteño creció en México y la música de mariachi es parte de la banda sonora de su vida, pero no se había animado a explorarla profesionalmente, «por respeto».
Si se pusiera la música mexicana en un altar, pondría al mariachi en el lugar principal, por su universalidad, indica Tapia.
«Por siempre ranchero» lleva 12 temas, entre los que se encuentran algunos de sus grandes éxitos y composiciones propias, como «Las Edades», «Mirando al Cielo», «Te Deseo Lo Mejor» y «Vamos a Darnos Un Tiempo».
También, el álbum incluye la canción inédita «Te voy a olvidar».
El sencillo que promueve actualmente es «Hasta la Miel Amarga», una nueva versión del tema clásico de Los Tiranos Del Norte con la que está nominado a los Premios de la Radio, en la categoría Canción Mariachi del Año.
«Esa canción la cantaba yo como loco cuando era adolescente», recordó el músico de 38 años.
Dirigido por Mario Oros, el video que acompaña a este lanzamiento fue rodado, con «sabor» a película, en la hacienda La Cofradía, en la ciudad de Tequila (México).
La producción cuenta la historia de un amor aparentemente imposible entre un joven empleado de la hacienda tequilera y la hija del dueño.
La historia, que bien podría ser una telenovela tradicional, entronca con los temas de amor y desamor de «Por siempre ranchero».
A diferencia de la mayoría de las producciones discográficas de hoy en día, en las que las computadoras han sustituido a los músicos, en este disco Tapia apeló a lo tradicional.
Para ello echó manos de la red de artistas que conoció en su infancia, cuando era parte de la Orquesta Sinfónica de Culiacán, la ciudad mexicana donde fue criado por su abuela.
«Siento mucho orgullo de este disco. Contamos con los mejores músicos de la zona, bueno, de México», rectifica.
Tapia estrenará en vivo su nueva propuesta el próximo sábado en The Forum, en la ciudad de Los Ángeles, California, donde ofrecerá un «gran concierto» junto a Ramón Ayala (El rey del acordeón), Los Cadetes de Linares y Banda Machos.
«Es un reto grande», reconoció el artista quien dice sentirse incómodo en lo que debería ser su zona de confort, pero que ha elegido estos temas por ser «parte importante de mi historia personal».
«Hay que moverse para seguir creciendo. Yo tenía años llenando el (teatro) Microsoft, con 7.000 personas. Éste tiene (capacidad para) 18.000».
Tapia confía en que hay público para todos los géneros de la música mexicana en todas partes del mundo. «Cada vez hay menos límites y no solo al mexicano le gusta la música norteña. El resto del mundo ya no cree que los mexicanos hacemos solo mariachis», remarcó.
Las fusiones que los reguetoneros están haciendo con artistas de la música mexicana, como el «remix» del corrido «Soy el diablo» en el que Nataniel Cano colabora con Bad Bunny, es una prueba fehaciente, anotó Tapia.