México, 3 sep (EFE).- Garantizar el derecho a la educación desde edad temprana e incrementar la calidad de vida de niñas y niños con discapacidad, es el objetivo de la iniciativa Modelo de Atención y Cuidado Inclusivo (MACI) presentada este martes por instituciones de salud de México y de la región latinoamericana.
La iniciativa MACI proveerá de las herramientas a 6.000 agentes educativos que laboran en los Centros de Atención Infantil con capacitación para darles herramientas y habilidades con el fin de que brinden atención inclusiva sin discriminación por razón de discapacidad a niñas y niños.
La iniciativa es impulsada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF) y 11 entidades gubernamentales.
En México existen alrededor de 150.000 niños entre cero y seis años de edad con discapacidad, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) pero no se tiene registro de cuántos acuden a un Centro de Atención Infantil, explicó el doctor Miguel Ángel Malo, asesor de Enfermedades Crónicas no Transmisibles y Salud Mental dlas tienee la OPS.
Lorenzo Jiménez de Luis, representante en México del PNUD, enfatizó que en la región de América Latina y el Caribe existen 85 millones de personas con discapacidad que enfrentan mayores dificultades en su día a día.
La discapacidad «es causa y consecuencia de la pobreza» y a nivel individual las personas que la padecen tienen mayores obstáculos para acceder a un trabajo y la remuneración es mucho más baja para ellos, subrayó.
A nivel familiar hay un impacto en su condición de riqueza o pobreza, en la mayoría de los casos, ya que se generan gastos por la misma discapacidad, indicó.
Por ello, dijo Jiménez, esta iniciativa contribuirá a que las personas con discapacidad tengan las mismas oportunidades que cualquier persona y no dejará a nadie fuera de un modelo sostenible.
La titular del SNDIF, María del Rocío García Pérez, indicó que de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación 2017 del INEGI, el 58,3 % de los discapacitados, declaró haber experimentado al menos una situación de discriminación.
«Para revertir estas cifras las acciones, programas y políticas que implementemos hoy para mejorar desde la primera infancia la atención que reciben niños con discapacidad abonarán al fortalecimiento de sus capacidades, una adecuada rehabilitación e inclusión», destacó la titular del SNDIF.
La doctora Cynthia Valdés, titular de la Unidad de Desarrollo Social y Económico PNUD, coincidió en que se debe promover la educación inclusiva y transitar a una educación para la diversidad, por ello los sistemas se deben adaptar a las necesidades de los niños.