México, 14 sep (EFE).- Convencido de que la Independencia es precedente de la transformación que quiere para México, el presidente Andrés Manuel López Obrador conmemora los 209 años de la gesta histórica de 1810 con nuevos elementos y un deseo de marcar diferencia con los anteriores gobiernos, a los que califica de neoliberales.
«El reto de él es ser distinto, porque eso la da popularidad, y entonces quiere ser distinto y presenta algunas novedades», comentó este sábado a Efe el analista mexicano Roy Campos sobre los festejos por la Independencia de México -15 y 16 de septiembre-, los primeros como presidente de López Obrador, en el cargo desde el 1 de diciembre del 2018.
El punto de rompimiento con los gobiernos anteriores radica en el concepto de López Obrador sobre la gesta histórica de 1810, a la que define como la primera de las grandes transformaciones de México y, por tanto, el primero de los antecedentes del movimiento social que lidera y que llama la «Cuarta Transformación» de la vida pública de México.
Detrás de su visión sobre la Independencia de México están los conceptos que hace meses llevaron al presidente a escribir una carta al rey de España, Felipe VI, y al papa Francisco exigiendo disculpas para los pueblos indígenas por los abusos cometidos durante la conquista de lo que actualmente es México.
En este mismo sentido, mediante su Secretaría de Cultura, el gobierno de López Obrador ha destacado que esta celebración «en el marco de la cuarta transformación, obliga a repensar la narrativa histórica que acompañó a la gesta de independencia» desde los primeros textos escritos sobre el tema.
López Obrador afirma que la historia de México está marcada por tres grandes momentos, tres transformaciones: la Independencia (1810-1821), la Reforma (1859-1867) y la Revolución (1910-1921). Su gobierno, afirma, es la cuarta gran transformación que necesita el país.
Aunque pacífica, a diferencia de las previas, que estuvieron marcadas por la confrontación armada.
Con estos conceptos López Obrador «se está poniendo al mismo nivel que la efeméride que se conmemora», expresó a Efe el historiador Alfredo Ávila, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien no halla novedades notables entre las fiestas patrias celebradas hasta 2018 con la que hará el nuevo gobierno.
«La visión que tiene el gobierno de la historia de México es una visión muy convencional, no tan novedosa. Novedoso sería poner atención a grupos minoritarios, mujeres, a comunidades campesinas. Desde la propia imagen institucional de la presidencia con Hidalgo y Morelos, es lo que el Estado mexicano construyó a lo largo del tiempo como la imagen de la Independencia», comentó Ávila.
Este año, la conmemoración «será diferente», sostuvo el gobierno mexicano al anunciar que las fiestas -que tienen como elementos clave una verbena, el Grito y el desfile militar- rescatarán la importancia de las culturas y las tradiciones del país.
Como primera innovación, este año se ha llamado a celebrar en un acto masivo en el Zócalo, una especie de «fiesta cívica» que a diferencia de las verbenas de cada año tendrá por primera vez representaciones culturales de los 32 estados de la República para cerrar con un multitudinario concierto musical, después de la ceremonia del Grito.
Si el objetivo es mostrar que tiene respaldo popular, el festejo «le va a salir muy bien» A López Obrador, que podrá ver lleno el Zócalo de la capital, que él gobernó (2000-2005) y que hoy gobierna su Movimiento Regeneración Nacional (Morena), asegura Campos.
En el Grito, el presidente en turno sale al balcón central de Palacio Nacional, toca la campana y grita ¡Viva México! en varias ocasiones con evocaciones de los héroes de la Independencia, cuyos nombres se ajustan al gusto histórico del mandatario de turno.
El Grito de Dolores, la acción del cura Miguel Hidalgo de tocar la campana de la iglesia de Dolores para llamar a la insurrección contra la corona española, puso en marcha la guerra de Independencia de México, que se consumó en 1821 con la entrada a Ciudad de México del Ejército Trigarante, encabezado por Agustín de Iturbide.
«Va a salir, va a gritar, va a incluir algunos gritos nuevos. Va a gritar ‘Viva la cuarta transformación’; va a meter algunos héroes que los otros no habían metido, los héroes que él admira», señala Campos, director de la empresa encuestadora Consulta Mitofsky.
Para el historiador Ávila, no es novedoso que el presidente mencione a los héroes de la Independencia que son de su gusto. «Cada presidente hizo lo mismo», sostiene.
Para el desfile militar del 16 de septiembre, el gobierno de López Obrador confirmó la incorporación de la recién creada Guardia Nacional y de civiles con carrozas alusivas a la las cuatro transformaciones: la Independencia, la Reforma, la Revolución y la de López Obrador.
Además, también participarán contingentes extranjeros como la Guardia Civil española.
En los desfiles militares de esta fecha celebrados en anteriores gobiernos han participado miembros de la Policía Federal y de la Gendarmería Nacional, cuerpos de seguridad previos a la Guardia Nacional.
«Cada gobierno se presenta como algo novedoso respecto a los anteriores», dijo el historiador Ávila, y como ejemplo recordó que Enrique Peña Nieto (2012-2018) metió a la Gendarmería en el Desfile del 16 de septiembre.
