Cumplió con el Sacramento de la Eucaristía la pequeña Carolina de Anda Nava, siendo la parroquia de Nuestra Señora de la Soledad, en el Campestre, el recinto que reservaron René de Anda y Olimpia Nava para la Primera Comunión de su heredera.
La compañía de sus más allegados familiares y amigos en un día tan especial fue de suma importancia para la nueva comulgante, quien sin duda guardó en el corazón el emotivo mensaje que el sacerdote le ofreció.
Por la tarde, en el salón Olimpia ofrecieron los anfitriones una tertulia de celebración, con exquisito banquete, música y juegos organizados para los chicos, gozando de espectacular reunión familiar.