México, 4 ago (EFE).- El Gobierno mexicano deportó por vía aérea a 106 migrantes de nacionalidad salvadoreña, la mayoría menores de edad, desde el aeropuerto internacional de la ciudad de Zacatecas, informó este domingo el Instituto Nacional de Migración (INM).
Este fue el «primer retorno asistido» que realizan las autoridades mexicanas hacia El Salvador, relató el organismo a través de un comunicado.
El avión, operado por una compañía comercial, partió anoche desde Zacatecas, en el centro del país, con 24 adultos y 82 menores de edad a bordo.
El INM informó que oficiales de Protección a la Infancia se encargaron de garantizar «el principio de unidad familiar» y atendieron a «las niñas, los niños y adolescentes que viajaban con sus familias, así como a los que no iban acompañados».
Desde el mes de marzo, el INM y la Policía Federal han gestionado 27 vuelos para retornar a migrantes indocumentados a San Pedro Sula, en Honduras, a través de los cuales se han deportado a 2.826 personas.
Asimismo, se han realizado 14 vuelos hacia Cuba, que han trasladado a 967 personas, y cuatro vuelos hacia Haití, con 330 personas a bordo.
Los migrantes guatemaltecos, en cambio, son retornados por vía terrestre, puesto que México comparte frontera con este país centroamericano.
«El INM ratifica su compromiso de salvaguardar la integridad física de las personas extranjeras que transitan por territorio nacional, con respeto a sus derechos humanos independientemente de su condición migratoria», reivindicó el organismo.
Desde octubre de 2018, se intensificó el flujo de miles de migrantes provenientes en su mayoría de Centroamérica que atraviesan México con el objetivo de llegar a Estados Unidos.
A raíz de este éxodo, el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció a finales de mayo la imposición de aranceles a todos los productos mexicanos como castigo por no frenar la migración.
Pero el 7 de junio se llegó a un acuerdo «in extremis» para evitar los aranceles que se ha traducido en el despliegue de miles efectivos de la nueva Guardia Nacional en la frontera sur y norte para controlar el fenómeno migratorio.
Esto se ha reflejado en una baja del 36,2 % en el número de migrantes que llegan a Estados Unidos desde México.
Además, el Gobierno mexicano ha impulsado un plan de desarrollo económico para Centroamérica a fin de frenar la migración forzada, el cual Estados Unidos se comprometió a apoyar.