Bogotá, 8 ago (EFE).- Varios carteles mexicanos han filtrado dinero en algunas campañas electorales en Colombia para los comicios locales y regionales que se celebrarán el próximo 27 de octubre, denunció este jueves la Fundación Paz y Reconciliación (Pares).
«Los carteles mexicanos están ahora en todo, están no solo en la violencia y el trafico de droga, sino que empiezan a influir en la política local también», afirmó en una rueda de prensa el director de Pares, León Valencia.
Valencia detalló al presentar el informe «Candidatos cuestionados a Alcaldías y Gobernaciones» que en municipios de la costa pacífica como Tumaco, del departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, los grupos narcotraficantes mexicanos «tienen una importante presencia».
Tumaco, un municipio con un amplio territorio rural dependiente de su gobierno, es la localidad con más hectáreas de coca sembradas en toda Colombia y además cuenta con el segundo puerto del país en el Pacífico, por lo que su control es fundamental para el narcotráfico.
Por su parte, el subdirector de la fundación, Ariel Ávila, afirmó que hasta el momento se han identificado al menos ocho candidatos que son patrocinados por carteles mexicanos.
Estos se concentran principalmente en los municipios de Cáceres, Caucasia y Tarazá, en la región del Bajo Cauca antioqueño, y en la del pacífico nariñense, exactamente en Tumaco, Magüí Payán, Barbacoas y La Tola.
De igual forma, Ávila señaló durante la presentación del informe que en el departamento del Cauca hay alerta en los municipios de López de Micay, Timbiquí y Guapi.
El próximo 27 de octubre, 36,8 millones de colombianos están llamados a las urnas para elegir 32 gobernadores, alcaldes de más de 1.110 municipios, concejales y diputados regionales para un periodo de cuatro años que comenzará el 1 de enero de 2020.
Los carteles mexicanos no son los únicos grupos ilegales que están filtrando las campañas electorales, pues el Clan del Golfo, principal grupo heredero del paramilitarismo, también lo hace en la costa pacífica y el bajo Cauca, y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y disidencias de las FARC en La Guajira, según el informe de Pares.
En el documento, Pares resalta que en esa primera muestra identificaron 98 candidatos cuestionados de 243 que aspiran a alcaldías y gobernaciones en 27 de los 32 departamentos colombianos.
Estos son señalados también por corrupción (53), herencia de parapolítica -como se conoce en el país el escándalo por vínculos entre políticos y grupos paramilitares- (29), parapolítica (9) y nexos con otros grupos al margen de la ley (7).
La presencia de estos 98 candidatos cuestionados a las elecciones es producto de la «impunidad judicial, política y social», pues a pesar de que algunos han estado en procesos con la Justicia no han sido imputados.
Los departamentos con mayor número de políticos cuestionados son Antioquia (10), Córdoba (9), Chocó (8), Meta (7), Arauca, Bolívar y Cesar (6), La Guajira, Santander y Valle del Cauca (5), y Casanare, Cauca, Risaralda, Sucre y Tolima (3).
Otra de las conclusiones del informe resalta como «un fenómeno político nuevo» la aparición de algunos partidos de etnias como la Alianza Democrática Afrocolombiana (ADA), que con solo tres meses de existencia ha avalado a 3.500 candidatos.
Lo anterior se podría dar por el manejo que hace de esa bancada Luis Alberto Gil y Carlos Martínez Sinisterra, condenados por parapolítica, según el informe de la fundación Pares.
Asimismo, la fundación alertó de la existencia de «autoritarismos regionales» que limitan la competencia política a raíz de linajes políticos en departamentos como Atlántico, con la familia Char; en Cesar, con los Gnecco; y en el Valle del Cauca con la actual gobernadora, Dilian Francisco Toro.
El informe «Candidatos cuestionados a Alcaldías y Gobernaciones» es la primera entrega que Pares realiza previo a las próximas elecciones regionales, y los otros dos se enfocarán en la violencia política y los clanes políticos.