La Catedral Basílica de Aguascalientes abrió sus puertas en punto de las cinco de la tarde para recibir a los fieles creyentes del décimo día de peregrinaciones en honor a Nuestra Señora de la Asunción.
En esta ocasión, los feligreses provenientes de las parroquias de Jesús, María y José, El Buen Pastor, Santo Domingo Savio, María Madre y Reina de Nuestras Familias, Santo Toribio Romo, Nuestra Señora del Refugio, La Transfiguración del Señor, Nuestra Señora de los Remedios y sus capellanías fueron recibidos por el Obispo José María de la Torre, quien les dio una cálida bienvenida.
Con porras, oraciones y cantos llegaron hasta el altar los cientos de peregrinos, para luego de tomar sus lugares escuchar atentos el Evangelio y posteriormente la homilía, la cual estuvo a cargo del Padre David Alejandro Caballero, quien comenzó mencionando: “Dios creó a Adán y Eva para que nacieran Caín y Abel, y formaran la familia; desde el principio así es el plan de Dios, la familia es la joya, la creación de Dios, todo el universo tiene por centro la familia; Dios creó todo de menos a más, el culmen varón y mujer, la familia es lo más importante de la creación de Dios”.
Posteriormente, invitó a reflexionar a los presentes sobre cómo actualmente la familia está siendo atacada, y pide no permitir que se sigan destruyendo matrimonios y vidas porque son la joya de Dios.
Finalmente, el Obispo se encargó de dar la bendición y así concluir la misa para dar pie a la siguiente peregrinación, la cual llegó en punto de las siete de la noche con las parroquias provenientes de Nuestra Señora del Tepeyac, Sagrado Corazón, San Juan Bautista, Santa María Asunta, San Agustín, Santa Eduviges, Santos Ángeles Custodios, Puertecito de la Virgen, Emperatriz de América y San Juan Pablo II.