La pequeña Romina López recibió su primera comunión durante una misa que se llevó a cabo en el templo de Nuestra Señora de la Asunción, en punto de la una de la tarde.
La festejada llegó al recinto en compañía de sus papás y padrinos, quienes se comprometieron con ella para guiarla por el camino del bien y ser sus guías espirituales.
Finalmente llegó el momento en el que Romina se convirtió en comulgante, y luego de ser bendecida salió del templo para seguir celebrando con una comida que sus papás le organizaron para que disfrutara de su día y estuviera acompañada de sus familiares más cercanos.