México, 6 jun (EFE).- El Gobierno de México manifestó este jueves su desacuerdo con el enfoque utilizado por la agencia Fitch Ratings para rebajar la calificación soberana del país y de la empresa estatal Petróleos Mexicanos (PEMEX).
Esta baja en la calificaciones «se da cuando se ha demostrado el apoyo total del gobierno a la empresa estatal y se está trabajando en dar una solución a sus problemas estructurales y financieros», dijo la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en un comunicado.
Fitch Rating anunció el miércoles el ajuste de la calificación soberana de México en moneda extranjera y local de BBB+ a BBB con perspectiva estable y este jueves redujo la nota de Pemex de BBB- a BB+ con perspectiva negativa.
«Es desafortunado que la agencia Fitch Ratings penalice doblemente el balance financiero del país», señaló la Secretaría de Hacienda al dejar en que el gobierno mexicano «expresa su fuerte desacuerdo con el enfoque aplicado por esta calificadora».
Hacienda dijo que, por el lado soberano, la agencia argumenta que los riesgos a las finanzas públicas se han incrementado porque la deuda de Pemex representa contingentes pasivos para el gobierno, asumiendo así un apoyo inminente a la empresa.
Y al mismo tiempo, la calificadora penaliza a Pemex por considerar que el respaldo que ha recibido del gobierno «es moderado e insuficiente», dijo Hacienda al señalar que el apoyo a Pemex se mantendrá para que se consolide como una empresa eficiente y rentable en el mediano y largo plazo.
Sobre las acciones anunciadas por la calificadora Moody’s, que ratificó la calificación soberana de México en A3, dos grados por encima de Fitch Rating, al tiempo que modificó la perspectiva de la calificación de estable a negativa.
Esta calificación de Moody’s establece una línea de tiempo de 18 meses para que se haga una potencial revisión de la calificación en tanto que sobre Pemex, esta agencia revisó su perspectiva de estable a negativa.
Estas agencias «reconocen como fortalezas una economía amplia y diversificada, la sólida postura fiscal que ha consolidado la estabilidad macroeconómica, prudencia en la formulación de políticas macroeconómicas, así como un sistema bancario saludable», agregó.