Guadalajara (México), 8 jun (EFE).- El joven Santiago Márquez convirtió hoy un penalti en el minuto 65 para decidir el partido de homenaje a su padre, Rafa Márquez, en el que los amigos del ex jugador del Barcelona vencieron por 2-1 a las Leyendas del fútbol.
En el estadio Jalisco de Guadalajara, occidente de México, Rafa, considerado como uno de los tres mejores futbolistas mexicanos de la historia, salió de cambio en el minuto 36 por su hijo de 16 años en el momento más emotivo del duelo.
El defensa de la selección mexicana en cinco Copas Mundiales alineó en el primer tiempo en el equipo de sus amigos y después de ser sustituido por su hijo, vistió la camiseta del equipo de Leyendas en la segunda mitad.
Los Amigos, dirigidos por el mexicano Manuel Lapuente, estratega de México en el Mundial de Francia 1998, tomaron ventaja en el minuto 34 cuando Juan Carlos Medina le puso un servicio al colombiano Juan Pablo Ángel, quien remató de derecha en el área para darle ventaja a su equipo.
El cuadro de las figuras internacionales que contó entre otros con el chileno Iván Zamorano, el argentino Fernando Canevaghi, el español de origen brasileño Marcos Senna y el uruguayo Sebastián Abreu, empató en el minuto 44. El chileno Marcelo Salas aceptó un pase en el área y a la salida del portero tocó de zurda para marcar el 1-1.
En la segunda mitad Rafa se apareció con la camiseta del equipo visitante, pero el protagonismo se lo llevó su hijo al convertir la pena máxima, la mejor forma de darle un toque humano a un encuentro que tuvo más de alegría que de nostalgia.
Aunque la convivencia fue más importante que lo deportivo, las Leyendas buscaron el empate y estuvieron cerca de conseguirlo en el minuto 84 con una llegada de Senna, pero el mexicano Juan Carlos Leaño apareció oportuno y mantuvo la ventaja de los locales.
Rafael Márquez se retiró del deporte activo después del Mundial de Rusia 2018, tras cumplir una de las trayectorias más ricas del fútbol mexicano. A los 19 años emigró al Mónaco de la liga de Francia y entre 2003 y 2010 fue pieza importante en el Barcelona español con el que ganó cuatro títulos de Liga, dos de la Liga de campeones de Europa y un Mundial de clubes, entre otros logros.
Además vistió la camiseta del Atlas y el León mexicanos, el New York Red Bulls de la MLS y el Hellas Verona de Italia y fue líder de la selección mexicana en los primeros 18 años de este siglo.