México, 17 jun (EFE).- El Gobierno de México dijo este lunes que acabó la simulación y la demagogia sobre los desaparecidos, una tragedia de más de 40.000 casos, 26.000 cuerpos sin identificar y 1.300 fosas clandestinas.
«Ya cambiaron las cosas y ya se va a quedar atrás la simulación y la demagogia» sobre la búsqueda e identificación de desaparecidos, afirmó el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas.
Durante su asistencia a «Personas desaparecidas» celebrado este día en el noroccidental estado de Baja California, Encinas sostuvo que el gobierno pondrá un «hasta aquí» a la situación de engaño que se ha hecho a los familiares de los desaparecidos.
Reconoció que la búsqueda de desaparecidos es responsabilidad del Estado mexicano y por muchos años se buscó minimizar y ocultar el problema y la autoridad «no solamente fue omisa, sino que engañó a los familiares».
Encinas aseguró que el actual gobierno de México, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, no va a reproducir este tipo de conductas de minimizar y ocultar, mismas que calificó de corruptas y «profundamente inhumanas».
El funcionario manifestó que todos los casos serán atendidos sin distinciones y confirmó que se afinarán los protocolos de búsqueda, de exhumación, de identificación y que se hará frente a la emergencia que se vive en este ramo.
Encinas manifestó al Foro que el gobierno mexicano hará todo lo humanamente posible para cumplir en esta materia pero sin generar falsas expectativas entre los familiares de los desaparecidos.
«No queremos generar falsas expectativas, ni engañar a nadie, y siempre les vamos a decir la verdad por dolorosa que ésta sea», indicó el funcionario mexicano.
En marzo pasado, el gobierno de López Obrador reactivó el Sistema Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas, el cual ya había sido instalado en octubre pasado, durante los últimos meses del gobierno anterior.
Entonces, Encinas explicó el tamaño del problema al sostener que el gobierno actual heredó una deuda de 40.000 personas desaparecidas. 26.000 cuerpos, decenas de miles de restos óseos sin identificar y cientos de fosas clandestinas.