México, 20 jun (EFE).- México está pasando por un «momento trágico en el que es plausible secuestrar», dijo este jueves el actor y director Gael García Bernal en la presentación de su película «Chicuarotes», que aborda esta temática sin buscar una «respuesta moral».
García Bernal (1978, Guadalajara) habló en una rueda de prensa en la Ciudad de México sobre la cinta, que relata cómo dos jóvenes de San Gregorio Atlapulco, en el sur de la capital, tratan por todos los medios de salir de este lugar para huir de la miseria.
Pero «no trata de traer una respuesta moral», subrayó.
De acuerdo con García, la pérdida de la inocencia está presente en toda la película, en la que los protagonistas, los adolescentes Cagalera y Moloteco, se ven presionados por «narrativas impuestas» como «hay que salir de aquí, el boleto es el dinero y secuestrar a alguien nos lo puede dar».
La producción, a pesar de haber sido iniciada hace diez años, guarda profunda relación con la situación actual de México, donde la violencia y los secuestros han aumentado sustancialmente.
Los casos se han incrementado especialmente en la Ciudad de México, donde según la ONG Alto al Secuestro estos delitos aumentaron un 103 % entre enero y mayo frente al mismo periodo de 2018.
«La película es una fábula. no trata de traer una respuesta moral, trata de enfrentarlo. Busca una esperanza, una salida y reflexionar sobre pensamientos abstractos como la falta de amor», agregó el director.
La cinta, que fue presentada en el festival de Cannes (Francia), también comparte narrativas con lo que el cineasta denominó «fenómeno migratorio», como por ejemplo la sensación de los protagonistas de haber nacido en el lugar equivocado.
«El ser humano existe gracias a la migración. (…) En la peli existe una falta de compasión con tu propio entorno y el lugar que te vio crecer, que podría ser un paraíso», comentó.
Diez años después de comenzar a realizarse, «Chicuarotes», gentilicio de San Gregorio Atlapulco, se estrenará el 27 de junio en salas mexicanas.
La tardanza tuvo varias causas, pero la principal fue el terremoto del 19 de septiembre de 2017, tras el cual esta localidad, ubicada en Xochimilco, zona lacustre, quedó llena de escombros y de desesperanza.
Entonces el equipo de la película, cuyo guion estuvo a cargo de Augusto Mendoza, se volcó con la población ofreciendo ayuda material y visibilidad.
«Buscamos maneras de ayudar. Haciendo la peli allí, consumiendo allí y dando empleo allí. Nosotros ayudamos con víveres y otras cosas pero lo que se necesitaba era reactivar la economía. La película ayudó a esto e incluso a problemas previos al temblor», afirmó García Bernal.
Preguntado por el amparo que consiguió para consumir marihuana con fines recreativos, el director detalló que, aunque ni le gusta ni le «pega bien», «la marihuana en sí no ha matado a nadie, y la prohibición ha matado y destrozado a familias enteras».
Para él, la legalización de la marihuana es una de las formas para erradicar la violencia que genera la prohibición de las drogas, en específico de la marihuana, ya que este tipo de políticas, argumentó, han generado «lo opuesto a mejorar el entorno la salud, el marco civil o la disminución de la violencia».