México, 7 ago (EFE).- La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, informó este viernes que la capital mexicana comenzará la próxima semana la reapertura de piscinas, museos y cines con un aforo máximo del 30 %.
Precisó que el a partir del 10 de agosto retoman actividades las piscinas tanto abiertas como techadas; el 11 los museos y el 12 los cines.
«Seguimos en semáforo naranja (peligro alto) en la ciudad, creemos que esta disminución, aunque lenta tanto en el número de hospitalizaciones tiene que ver con las medidas preventivas», señaló Sheinbaum en conferencia de prensa a distancia.
Consideró que esa disminución ocurrió porque «una parte muy importante de la población y sus visitantes está usando el cubrebocas y aplican la sana distancia y el lavado de manos»,
BARES Y CANTINAS PUEDEN CAMBIAR DE GIRO
También indicó que, temporalmente, bares, cantinas, antros (discos) y salones de fiestas podrán cambiar de giro para poder operar como restaurantes a través de su registro en el programa del Gobierno.
Dijo que esta medida se toma con el objetivo de reactivar la economía y evitar la pérdida de empleos.
«Estos negocios pueden cambiar de giro a restaurantes, a fondas y para ello tienen que registrarse necesariamente en el registro del Gobierno de la Ciudad, se les da de inmediato el permiso pero tienen que cumplir con las mismas medidas que cumplen todos los restaurantes», indicó.
Además, recordó que el horario de apertura de todos los negocios en la capital será a partir de las 10.00 de la mañana y el cierre permanece a las 17.00 horas.
Luego de que México rebasó el jueves los 50.000 decesos por COVID-19, Sheinbaum consideró que cualquier defunción que ocurra en el país es lamentable al tiempo que evitó hablar de un escenario pesimista u optimista de la pandemia en el corto plazo.
Según el reporte más reciente de la Secretaría de Salud de México, en este país se acumulan 462.690 casos del nuevo coronavirus Sars-CoV-2 y 50.517 fallecidos.
En el caso de la capital, donde han fallecido 9.246 personas, dijo que cada fallecimiento «es lamentable y una perdida para la ciudad».
Pero a pesar de las cifras, la jefa de Gobierno aseguró que tanto las muertes como las hospitalizaciones por coronavirus han disminuido en la metrópoli desde mediados mayo.
Hasta el jueves por la noche, la Ciudad de México registraba un acumulado de 9.246 defunciones por COVID-19, 77.790 casos confirmados, 15.941 sospechosos y 3.837 casos activos.
Por otra parte, Sheinbaum dijo que la prohibición de la venta de comida chatarra (alta en azucares y grasas) a menores de edad en la capital mexicana, decisión que se tomó hace dos días en el estado de Oaxaca, «es una medida que se va revisar», pero lo seguro es que debe haber un cambio en la alimentación y nutrición de los capitalinos, concluyó.