Para librar la dura batalla contra la pandemia del coronavirus (Covid-19), fuimos obligados al confinamiento y poner en práctica el distanciamiento social, es decir, a mantenernos alejados los unos de los otros por lo menos durante casi cuatro meses para evitar la propagación del virus.
Poco a poco se vio la posibilidad de abrir gradualmente antros, cantinas, merenderos y bares de la ciudad cuidando estrictamente los protocolos impuestos por la Secretaría de Salud.
Estos espacios, por su característica, suelen ser cerrados, íntimos, algunos más pequeños que otros que propician la convivencia y el despabilamiento, sobre todo de la población más joven que busca relajarse y distraerse de los ajetreos diarios.
Durante un recorrido por el corazón del Centro Histórico de la ciudad, el reloj marcaba las 11 de la noche del pasado viernes que se celebraba el Día Internacional de la Cerveza, observamos a varios jóvenes que salieron a celebrar, en sus rostros había alegría y despreocupación mientras hacían filas para ingresar a los conocidos bares de Carranza, como se le conoce a la zona.
Nos acercamos para platicar con un grupo de cinco amigos que acababan de dejar su coche en un estacionamiento cercano y se dirigían a buscar el de más ambiente, fueron sus palabras, entre risas y nervios, por el temor a ser evidenciados comentaron que era la primera vez que salían y que ya se merecían un respiro, tres de ellos portaban cubrebocas, los demás lo traían en sus bolsillos, dijeron tener de entre 19 a 21 años y eran conscientes del virus, pero que ya hacía falta salir porque estaban de vacaciones.
Continuamos el recorrido y las filas seguían, la zona del Andador J. Pani estaba convertido en una auténtica feria, ya que los merenderos optaron por sacar las mesas sobre el andador para simular la sana distancia. Se pudo observar que el ambiente era más familiar, niños corrían de aquí para allá, había ambulantes con dulces, juguetes y globos, además de los puestos de tacos, chascas y hot-dogs sobre el atrio del Templo de San Marcos que le daban ese toque de fiesta y convivencia, en donde el distanciamiento social era el más olvidado.
La noche del sábado se pudo ver más afluencia, por lo que nos desplazamos a la zona de Las Américas, al menos una veintena de estos lugares como bares, cantinas y antros se vieron con cupo lleno, entre música ochentera, mariachi y rock, los jóvenes y no tan jóvenes brindaban, bailaban, se abrazaban y gritaban, bastaba verlos por las grandes ventanas que dan hacia la avenida, era cerca de la media noche y los valet parking seguían acomodando coches, el transito se tornaba lento.
Finalmente nos dirigimos hacia la llamada “Zona Dorada”, la conocida Avenida Luis Donaldo Colosio, donde pudimos observar uno que otro peatón que se dirigía a los exclusivos bares y cantinas mientras que otros llegaban en lujosos vehículos.
Afuera de un Antro estaba Juanpa y Josué, quienes muy amables nos comentaron que esperaban a unos amigos, ya que celebrarían el cumpleaños de una compañera, los dos portaban cubrebocas, los dos universitarios y los que llegarían también, por lo que dijeron que era la primera vez que se reencontrarían, y así fue, llegaron cerca de ocho compañeros, se abrazaron, felicitaron a la festejada y entraron al antro para brindar y bailar en su honor.
Seguimos caminando y vimos que salía una pareja de un bar, el cual a esa hora estaba a reventar, era cerca de la una de la mañana, les preguntamos que qué tal estaba el ambiente, la muchacha comentó que habían llegado a las diez y estaba tranquilo, incluso había mesas desocupadas y ella creía que así seguiría por el cuidado que se debe tener, pero que siguieron llegando chavos y más chavos, lo cual ya estaban amontonados, “me sentí apretada, no teníamos distancia, sentí miedo, ya adentro nadie trae cubrebocas, gritan, se mueven y bailan, por eso ya nos vamos”. Asintió medio enfadada.
LOS DATOS
El pasado 23 de mayo el Municipio de Aguascalientes emitió un acuerdo para que pudieran abrir sus puertas “todos los establecimientos mercantiles o lugares de cualquier giro cuyas actividades incluyan vender, consumir o expender bebidas alcohólicas”, dejando sin efecto el aviso general que se dio a conocer el pasado 18 de marzo de cerrar estos comercios con el fin de minimizar la transmisión o propagación del Covid-19. Por su parte el ISSEA dio su aval para que se comenzará la reactivación económica, siguiendo un protocolo de medidas y llenando formularios para que la Guardia Sanitaria evaluara los lugares y así garantizar que se cumpliera con todos los requisitos para evitar el menor riesgo posible de contagio.
Se puede leer en el documento “por lo establecido en el Artículo 1 de la Ley de Salud del Estado y en protocolo a la Ley de Salud del Estado de Aguascalientes, así como en cumplimiento a los protocolos y lineamientos que en materia de salud han emitido las autoridades federales y estatales, se informa a la población en general que deberán seguir los lineamientos y recomendaciones contenidas en los protocolos en materia de protección contra riesgos sanitarios de Covid-19 que emitió la Secretaría de Salud del Estado de Aguascalientes visible en su página oficial de internet, lo anterior a fin de salvaguardar la integridad de las personas y seguir mitigando los contagios y los riesgos para la salud que implica la enfermedad por el virus SARS-CoV-2”.
A nivel nacional el comportamiento del coronavirus con datos al 12 de agosto son 498,380 el total de casos confirmados acumulados, 29,094 son los casos confirmados activos y 83,473 conforman el total de casos sospechosos, mientras que se han contabilizado 54,666 defunciones por esta enfermedad.
En este mismo sentido, el panorama estatal en base a los datos del mismo 12 de agosto son 4,393 los pacientes recuperados y el total de casos confirmados es de 6,006. En cuanto a los casos sospechosos, al momento son 205 y 14,991 los casos negativos, mientras que los decesos ascienden a 348.
El porcentaje de pacientes positivos por grupo etario, el más alto corresponde a las edades de 25 a 29 años que representa el 13.5%, antecediéndolo el grupo de 20 a 24 años con un 8.2%, mientras que el 11.8% pertenece a las edades de 30 a 34 años, por lo que en el último mes el aumento de contagios se ha presentado mayormente en la población joven.