México.- La Asociación de Bancos de México (ABM) señaló este martes la falta de un programa «amplio» de inversión del Gobierno para la recuperación económica por la crisis de la COVID-19, aunque reconoció los programas sociales impulsados por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
«No hay un programa amplio de mayor inversión de parte del Gobierno, si lo comparamos con lo que ha sucedido en otros países, pues sí es menor, pero no es que tenga la razón o no la tenga porque estamos todavía en una contracción económica de cerca del 10 %», dijo Luis Niño de Rivera, presidente de la ABM.
Además de 76.600 muertes y casi 734.000 casos del causante de la COVID-19, el coronavirus SARS-CoV-2, la crisis ha destruido un millón de empleos formales, ha situado la tasa de desempleo en el 5,2 % y ha provocado una contracción histórica anual del 18,7 % del PIB en el segundo trimestre del año.
Aun así, el paquete económico de México para aliviar los efectos equivale a sólo 1,1 % del PIB, por debajo del promedio regional de 3,2 %, de acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Por ello, el representante de los banqueros mexicanos destacó la importancia del Plan Nacional de Infraestructura que el lunes próximo presentarán el Consejo Coordinador Empresarial, principal patronal del país, y López Obrador.
«Eso es parte de lo que necesita la economía para volverse a levantar», manifestó Niño de Rivera en rueda de prensa.
El líder de la ABM reiteró que la banca «puso sobre la mesa» el 4,5 % del PIB con el programa para diferir pagos para aliviar los efectos de la pandemia sobre los deudores.
Esto, detalló, porque la banca dejó de cobrar capital por un billón de pesos (casi 44.620 millones de dólares) e intereses por 69.000 millones de pesos (más de 3.000 millones de dólares) en beneficio de 8,6 millones de personas.
«La situación de actual de la banca es muy favorable, como la vieron, seguimos siendo parte de la solución y queremos seguir apoyando a nuestros clientes, pero el ritmo de recuperación de la economía es un tema que abarca muchos más asuntos que tienen que ver con el apoyo de gobiernos», indicó.
El banquero señaló que el crédito bancario creció un 1 % anual en julio pese a que el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) disminuyó 9,8 %.
Aun así, observó que el crédito al consumo se redujo un 5,5 % anual en julio con un caída del 9 % en el monto facturado en las tarjetas de crédito en agosto.
En contraste, la captación bancaria ha tenido un incremento de 715.000 millones de pesos (más de 31.190 millones de dólares) en los primeros siete meses del año, 14,2 % más que el mismo periodo de 2019.
«Quiere decir, por un lado, que las personas físicas principalmente en captación a la vista y las empresas están privilegiando el ahorro contra el crédito, prefieren tener mayor cantidad de dinero disponible y ser prudentes», observó Niño de Rivera.