Enrique Peña Nieto, Felipe Calderón Hinojosa, Vicente Fox Quesada, Ernesto Zedillo Ponce de León y Carlos Salinas de Gortari, ex-presidentes de México, irían al banquillo de los acusados, pues así lo decidieron, no por unanimidad, los integrantes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Con tan sólo un cambio de sintaxis, magistrados aprobaron una nueva pregunta para la consulta popular que propuso el actual mandatario Andrés Manuel López Obrador: ¿Estás de acuerdo o no en que se lleven a cabo las acciones pertinentes con apego al marco constitucional para emprender un proceso de esclarecimiento de las decisiones políticas tomadas en los años pasados por los actores políticos encaminada a la justicia y los derechos de las posibles victimas?. Y la respuesta fue sí, y los magistrados dieron el visto bueno a la polémica consulta.
Se abre así un inédito acontecimiento en la vida política del país.
Y aunque siempre se ha pronunciado López Obrador en el sentido de que no busca venganza, pues resulta que siempre sí, pero no tomó la decisión él sino que la dejó al grueso de la población que con su voto manifestará su voluntad de condenar los malos manejos de quienes han gobernado nuestra nación desde 1988.
Y la ya conocida respuesta ante la replanteada cuestión, como se conoció ayer, abre la puerta a que también tengan que rendir cuentas todos los actores políticos por las decisiones tomadas en años anteriores, y como dicen que la venganza en plato frío sabe mejor, pues adelante.
Y pues seguramente vendrán las respuestas jurídicas de los ex-mandatarios y funcionarios y todo aquel que le toque el salpicadero de la venganza, y ¿por qué no? también pueden surgir amparos con argucias legales para no enfrentar a la justicia varios años después de su mandato, pues atentaría, seguramente, contra los derechos humanos de algunos de los ex-presidentes y que seguramente no se quedarán de brazos cruzados ante este atropello, así lo verán algunos, tomado en el máximo tribunal de justicia del país.
Se los dijo ayer en su cara a sus compañeros uno de los ministros que votó en contra, Javier Laynez Potisek: “Los jueces constitucionales no somos nombrados para ser o para ganar popularidad, los poderes Ejecutivo y Legislativo sí”; más claro, ni el agua.
Evidentemente no todo el trabajo realizado por los ex-presidentes fue malo, pero aunque muchas de sus obras y acciones fueron en beneficio colectivo, pesa más, como siempre en el ánimo del humano, las cosas malas, y ahora los cinco ex-mandatarios tendrán que someterse, si el pueblo lo decide, a la justicia.
Un poco más tarde de conocerse la decisión de la SCJN sobre la constitucionalidad de la consulta para el juicio, la respuesta desde Palacio Nacional no se hizo esperar y vino de parte del vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez, quien aseguró que “la decisión es un paso trascendental para la construcción de una democracia verdadera”.
Y aunque la fecha de la consulta se ve lejana, pues se realizará en agosto del próximo año, la moneda está en el aire y la inédita decisión encendió el ánimo de la resentida población que perdona, pero no olvida.