Miami, 13 oct (EFE News).- Chiquis Rivera no cree en falsas modestias ni en esconderse hasta que pase el huracán de comentarios que ha desatado su nominación a los Latin Grammys de 2020 en la categoría «Mejor Álbum de Banda» por su disco «Playlist». De hecho, aseguró en entrevista con Efe que hizo «el proyecto con los premios en la mente».
«Sé que se debe decir que ya ser ser nominada es un premio, y sí, lo valoro mucho, pero ´Playlist´ se merece ganar. No estoy desmereciendo el trabajo de mis compañeros ni mucho menos. Pero quiero que se entienda que mi álbum fue trabajado con mucho amor, con mucho cuidado y tuvo una gran inversión para que tuviera la mayor calidad posible», subrayó.
En las redes la acusaron de haber usado dinero para obtener la nominación, mientras que comentadores de televisión llegaron a anunciar el reconocimiento y enumerar bandas que, según ellos, se lo merecían más que ella.
La artista comparte la categoría con grandes de la música de banda como La Arrolladora Banda El Limón, La Séptima Banda, Banda La Ejecutiva de Mazatlán Sinaloa y «Banda Lirio.
En otro artista o en otro momento, sus declaraciones podrían ser leídas como arrogantes, pero Rivera está más que orgullosa del trayecto que ha recorrido desde que sacó su primer disco, «Ahora», en 2015.
Esa producción fue recibida con fuertes críticas pero, como buena hija de la aguerrida cantautora y empresaria Jenni Rivera, fallecida en diciembre de 2012, Chiquis decidió no dejarse abatir.
Su segundo proyecto, «Entre botellas», logró convencer un poco más, pero le supo a poco. La artista decidió que, como bien dice el dicho, «a la tercera va la vencida».
«Yo creo mucho en la numerología y el número tres es importante. Sabía que este tercer disco tenía que ser algo muy especial y desde que comencé a pensar en él la meta era ser vista por La Academia (de la música latina)», recordó.
Decidió patear el tablero y hacer temas que le hablaran y no «que entraran dentro de lo que la industria esperaba de mí».
En «Playlist», Chiquis trabajó ritmos musicales como la banda mexicana clásica, la cumbia, la ranchera y la quebradita y se atrevió además a darle el toque del regional al country estadounidense con su versión de «Jolene», a dueto con Becky G.
UN DISCO CARO
Para realizar «Playlist», Chiquis afirmó que «se hizo una inversión importante de tiempo, esfuerzo y dinero». La artista y su equipo grabaron en el mejor estudio que pudieron financiar y trabajaron con productores de la «mejor calidad» y no descansaron hasta lograr las colaboraciones con los artistas que querían.
«Entre lo más caro fue el proceso de ´masterización´ y mezcla. Quisimos hacer el sonido más limpio posible, con una gran calidad y profesionalismo. Logramos trabajar con los mejores y el resultado ha sido la nominación», aseguró.
Pero, además, es un disco en el que quiso «presentar» a Janney, indicó la artista su nombre de pila, pues, para ella, Chiquis es la hija de La Diva de la Banda.
«Janney es la mujer que soy yo hoy en día y como artista me encanta experimentar, me gusta atreverme y soñar con hacer lo que dicen que es imposible. Por eso yo he trabajado en mi voz, en mi calidad profesional y no paro de trabajar. Esa es la que se ve en este disco y la que ha sido reconocida», dijo.
UN RECONOCIMIENTO EN EL MOMENTO MÁS NECESARIO
Los altibajos de una difícil separación de su esposo, el también cantante Lorenzo Méndez, y el acoso de los paparazi cada vez que tiene una crisis personal habían hecho que la artista se olvidara del anuncio de las nominaciones.
Se enteró del reconocimiento cuando la llamó su asistente y aún con los ojos llenos de sueño y en pleno llanto se conectó en vivo por Instagram para compartirlo con sus 4,2 millones de seguidores.
Tras contar que estuvo «llorando de la emoción como tres días seguidos», Chiquis explicó que siente la nominación como una «señal de Dios» de que está en el camino correcto, que esta «tomando las decisiones adecuadas en lo personal y en lo profesional».
«Me dio mucha emoción, pero también mucha paz», reconoció.