México, 25 oct (EFE).- La cantante chilena residente en México Mon Laferte acudió este domingo al Consulado General de Chile en la capital mexicana donde votó «apruebo» en el plebiscito para reemplazar la Constitución del país suramericano.
A través de su cuenta de Instagram, la artista publicó una fotografía en la que aparece en el interior del consulado votando con cubrebocas y un breve texto en el que reveló el sentido de su voto: «Ya voté #plebiscitoChile #apruebo».
En un vídeo que compartió, se ve a miembros de la mesa electoral y a otros votantes emocionados tomando fotos de la artista en el momento que emitía su voto.
La Embajada de chile en México anunció por la mañana a través de Twitter que ya está «en marcha el proceso de votación» del plebiscito.
Cerca de 14,8 millones de chilenos decidirán en las urnas si quieren o no reemplazar la actual Constitución, heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), y qué tipo de órgano debería redactar el nuevo texto.
A raíz de esta votación, considerada como la más importante en tres décadas, se reportaron largas filas en Chile para depositar el voto y hubo aglomeraciones a las afueras de los consulados de Berlín, Londres, Madrid o Buenos Aires.
El plebiscito, convocado para descomprimir la grave ola de protestas desatadas el año pasado contra la desigualdad y en favor de mejores servicios básicos, se celebra bajo estrictas medidas sanitarias y de distancia física, que podrían explicar en parte las largas filas.
Durante las protestas del año pasado, Norma Monserrat Bustamante Laferte (Villa del Mar, 1983) mostró desde México todo su apoyo a los manifestantes y denunció que la actuación del presidente chileno, Sebastián Piñera, era una «vergüenza».
En noviembre, Mon Laferte apareció en la alfombra roja de los Latin Grammy en Las Vegas (Estados Unidos), donde ganó un galardón, con los pechos al descubierto denunciando que en Chile «torturan, violan y matan».
La participación, que aún se desconoce, es el gran desafío de esta votación, pues puede verse mermada por el miedo al contagio y por la alta abstención instalada en Chile desde que el voto dejó de ser obligatorio en 2012.