Aguascalientes no sólo forma parte de las diez entidades con mayor riesgo de volver al nivel máximo de peligro epidemiológico por Covid-19, sino que además ha retomado el primer lugar nacional en ocupación de camas con ventilación asistida, con un 63% de ocupación, colocándose como uno de los peores estados en el manejo y control de la pandemia.
De igual forma, es nuestra entidad la tercera, después de la CDMX y Querétaro, con mayor incremento en la actividad epidémica en las últimas semanas, mostrando una tasa de contagios de 90 casos por cada 100 mil habitantes, dato que contrasta de forma escandalosa con los datos proporcionados este fin de semana por las autoridades sanitarias estatales que, justo al contrario, redujeron el nivel de riesgo de la pandemia del coronavirus, a pesar que no ceden los contagios y las muertes por el Covid-19.
El contraste de los datos que ofrece la Secretaría de Salud con los datos del Instituto de Salud de Aguascalientes muestra que hay no sólo una guerra de semáforos entre el estado y la federación, sino que además persiste la idea local de mantener la narrativa de «tranquilidad y efectividad» del decreto emitido por el gobernador en días anteriores. Sin embargo, la frialdad de los números echa por tierra el optimismo de las autoridades estatales.
Fue José Luis Alomía Zegarra, director de epidemiología de la Secretaría de Salud federal, a quien tocó destacar de nueva cuenta que Aguascalientes es la primer entidad en el listado de camas vcon ventilación ocupadas, colocándose en el 63% de ocupación de camas IRAG, muy por encima del promedio nacional del 33 por ciento.
Así mismo, Aguascalientes se encuentra dentro de las entidades que concentran el 70 por ciento de los casos activos en el país, uniéndose en este indicador a la Ciudad de México, Guanajuato, estado de México, Nuevo León, Querétaro, Durango y Coahuila.