(EL UNIVERSAL).- El ministro de Salud en Argentina, Gines González García, advirtió que la segunda ola de contagios de Covid-19 en América Latina, podría llegar a ser un maremoto si la población sigue relajando las medidas de prevención, ante la esperanza que está generando la vacuna.
«Si no logramos modificar el comportamiento colectivo de las sociedades, verdaderamente vamos a tener una segunda ola que podría ser un maremoto», alertó.
Al participar en el webinar «Velocidad, Seguridad y Equidad: Implementación de las Vacunas Covid-19 en América Latina y el Caribe», organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), lamentó el cambio de comportamiento de la gente en verano y las festividades por el anuncio del surgimiento de la inmunización.
«Tengo la sensación de que al cambiar la conducta tan brutalmente, por lo menos en mi país, de la población; en realidad si bien tenemos la vacuna y la primera terapéutica aprobada que es un adelanto importante para reducir mortalidad, lamentablemente el comportamiento de las personas ha cambiado sustantivamente quizá por el verano entre otras cosas», acusó.
Hizo ver que la velocidad de la expansión nuevamente de la pandemia, empezó a preocupar de una manera muy notable, «porque en realidad teniendo un horizonte de esperanza con la vacuna, con la terapéutica y algunas otras cosas, desafortunadamente estamos viendo que se ha invertido la curva de contagio».
«No quiero hablar de los nombres de los países de la región, pero me parece que está sucediendo en toda, por lo menos en América del Sur, y eso es más grave», ponderó.
El presidente del BID, Mauricio Claver-Carone, lo secundó al reconocer que efectivamente el verano y las fiestas, obviamente en todas partes se ha visto un rédito adicional en ese sentido.
Por su parte, el ministro de Salud de Chile, Enrique Paris, comentó que cuando inició la vacunación la gente de alguna manera «se liberó» o relajó al pensar que como ya llegó la solución, se pierde el miedo y deja de actuar con precaución.
Señaló que América Latina abandonó la beta de la producción de vacunas, por lo que se tiene que hacer un esfuerzo conjunto regional para tener en principio envasadoras de vacunas a granel, y etiquetadoras.
«Tenemos que avanzar en la producción regional de vacunas», consideró al advertir que las pandemias se van a repetir, por lo que se debe trabajar para las próximas generaciones.
«Cuando ya no estemos, debemos dejar a nuestros países preparados para una segunda, tercera, cuarta y quinta pandemias», manifestó.
La ministra de Salud de Honduras, Alba Consuelo Flores, apuntó que la vacunación es algo adicional para el control del nuevo coronavirus a mediano plazo.
Por lo que la población debe continuar con las medidas de seguridad establecidas como el lavado frecuente de manos, el distanciamiento social de manera permanente.
«La vacuna no es para toda la población, por eso la vamos a aplicar según las prioridades establecidas», señaló.