GUADALAJARA, Jal. (EL UNIVERSAL).- En el Guadalajara están conscientes que han quedado lejos de las expectativas futbolísticas, que han fallado a sus propios pronósticos para esta fecha, porque se hacían estar en los primeros puestos pero por fallas individuales, el equipo no ha repuntado según reconoció el capitán Jesús Molina.
«Merecemos estar donde estamos, esa es la realidad. En el futbol no hay ‘hubieras’, es de concentración, de aplicación, de afinar detalles y hay una diferencia mínima, los detalles que parecen no importar pueden marcar la diferencia y en un partido, dictan que pierdas o ganes tres puntos.
«Esa es la realidad, no hemos podido levantarnos del mal inicio que tuvimos, de los primeros tres partidos que en el papel eran ganables y no supimos. Todos somos culpables de este mal paso, estamos conscientes de que se viene una segunda etapa muy importante para nosotros y reconociendo que no estamos bien, será el parte aguas para levantar».
Los rojiblancos saben que la afición está molesta, la directiva de igual forma y reconocen la mala marcha del equipo, que dice Molina, están en muy buen tiempo para comenzar la cuesta arriba.
«No hay nada que ocultar, no hay nada que mentir. La situación es así, no estamos en el lugar que debemos estar, en el lugar que nuestra afición merece festejar que es en los primeros cuatro, cinco lugares de la tabla general porque nos lo planteamos en el inicio del torneo y no hemos podido estar a la altura por diferentes circunstancias».
Concentración en cada minuto de juego es lo que le ha faltado al equipo, no se debe a otra cosa, porque calidad individual existe y no corresponde la posición, a lo que consideran el equipo puede dar futbolísticamente.
«El equipo ha trabajado, se ha esmerado en el compromiso pero por cosas del futbol, por detalles individuales hemos perdido puntos cruciales que nos tendrían en una mejor posición en la tabla y estamos en deuda con ellos.
«No hay nada que ocultar, están ellos (afición) en la libertad de exigirnos porque somos un club grande y debemos pelear cosas importantes. La afición no está contenta igual que nosotros y tenemos que reconocer, darnos cuenta que no estamos a la altura de las circunstancias».
Lo único que le queda al Guadalajara es trabajar, ir partido a partido pensando siempre que el siguiente puede ser el parteaguas entre bajar la presión o de plano, que el semáforo rojo se encienda.
«Debemos ser optimistas, se viene una segunda parte del torneo que considero será favorable, depende de nosotros estar en los primeros ocho lugares. Queremos posicionarnos en un mejor lugar, llegar a la Liguilla que es a lo que aspiramos, ya estando ahí seguramente pelearemos por el campeonato. Confío en que vamos a estar ahí, es el compromiso de mi parte, del equipo que pueda estar a la altura de pelear por la calificación, que es el primer objetivo».
Jesús Molina considera que tienen calidad de sobra. En el diseño de torneo, el Guadalajara consideró que los rivales de inicio de torneo se le prestaban para que en la jornada siete, estuvieran posicionados entre los primeros cinco lugares y cuando enfrentaran a los considerados de nómina más importante en la Liga, ya estuvieran con mucha confianza, con una inercia ganadora pero reconoce Jesús Molina que esto fue solamente teoría y en la práctica fallaron, así que ahora van a remar contra corriente en la segunda parte del campeonato.
«Se vienen partidos muy importantes, primero Pumas, ya luego pensaremos en los rivales que se vengan como América, Tijuana que viene haciendo un buen torneo, Santos, pero eso es adelantarme a lo que todavía no sucede y vamos partido tras partido».
Llama la atención que Chivas tiene una gran cantidad de seleccionados, pero como equipo no funciona y es le produce sentimientos encontrados al capitán Molina.
«No hemos estado a la altura, la prueba es que tenemos 8, 9 jugadores en la Selección Preolímpica, tienen mucho talento y acompañados con gente de experiencia. Tenemos la verdad un plantel muy basto. Ese es el coraje, la impotencia que nos da porque sabemos de la capacidad que tenemos como plantel y debemos demostrarlos como equipo, por ello recalco el tema. Confío en que levantaremos».
Molina es un veterano, de jerarquía, pero en cinco partidos de siete que ha jugado el Guadalajara, el técnico Víctor Manuel Vucetich ha determinado sacarlo del campo, a lo cual dice el capitán, no se debe a una baja física ni mucho menos.
«Meramente una determinación táctica. Cuando salgo es cuando vamos perdiendo, entonces se busca un cambio táctico para buscar remontar el partido o simplemente para darle frescura al equipo, son decisiones técnicas, las acato. Obviamente a ningún jugador le gusta salir de cambio, siempre he estado acostumbrado a jugar los 90 minutos.
«Estoy consciente del rol que me toque desempeñar, si juego o no trato de dar lo mejor de mí. Mientras esté en Chivas, siempre intentaré dar lo mejor de mí porque la actitud no se puede negociar. Podré ser bueno o mal jugador, pero la actitud siempre estará».