A Arturo Ávila le costará mucho trabajo levantarse y recuperarse del descalabro que le han infligido o que se infligió tras el escándalo por pertenecer a la secta NXIVM, pues palo dado ni Dios lo quita, señaló el empresario transportista, Roberto Díaz Ruiz.
En primera instancia tendrá que hacer las aclaraciones pertinentes al interior de su partido político, posteriormente deberá volver a empezar, porque dicen que palo dado ni Dios lo quita; qué lástima que ocurran este tipo de hechos, aunque en campañas políticas todo puede pasar, manifestó Díaz Ruiz al resaltar lo delicado del asunto.
La gravedad es tal que al candidato a la Alcaldía por Morena le va a costar mucho remontar tras el descalabro que le han infligido o que se infligió justo en tiempos políticos, que son especialmente delicados, de golpeteo y en los que no se puede desechar ni avalar nada porque existen muchos intereses de por medio.
Por lo tanto, Morena también tendrá que hacer las indagatorias necesarias a que dé lugar el caso y tomar una decisión.
Por su parte, en su momento la sociedad, si sigue en marcha el proyecto político de Ávila, con sus reservas y análisis tomará las decisiones que considere pertinentes.
El empresario mencionó que a fin de cuentas el golpeteo político en las campañas es común, pero en este caso es preciso que el partido realice las averiguaciones necesarias porque van a remar contra corriente.
Mientras tanto, Roberto Díaz comentó que sin duda el contendiente tendrá que empezar de cero, ya que el escándalo es preocupante.
También indicó que por su parte conoce a Arturo Àvila desde hace tiempo, por lo cual es una lástima todo lo que está ocurriendo en pleno inicio de campañas políticas, las cuales son de las más atípicas en la historia.
