Aguascalientes, por tres días seguidos, ha sentido movimientos telúricos que han sorprendido a propios y extraños, pero más allá de la sorpresa, es un tema que causa preocupación.
Durante estos últimos días algunas zonas del país se han visto sacudidas por varios sismos y por lo menos tres de ellos los ha sentido la población de la Entidad.
Pero no sólo son sismos, sino inundaciones, incendios y huracanes los que han azotado a la República Mexicana, quien se ha visto castigada a nivel económico y social por estos fenómenos climáticos.
Echemos un vistazo: Puerto Vallarta fue afectada por el huracán ‘Ida’ quien prácticamente devastó esta ciudad, que es visitada frecuentemente por los hidrocálidos, porque es la playa que queda más cerca; de hecho, al momento de los hechos estaba a su máxima capacidad en ocupación turística y lamentablemente tuvo un saldo de varias personas muertas, entre ellas un niño español.
Lo que pasó en Ecatepec, Estado de México, donde las tormentas provocaron que se inundara y el agua se llevara todo a su paso, incluyendo por supuesto personas, algunas de las cuales perdieron la vida.
Y qué decir lo que pasó antier, día de tragedias: una repentina inundación causada por el desbordamiento de un río y que literal inundó la ciudad de Tula, Hidalgo, provocó que en un hospital del IMSS colapsara su planta eléctrica, por lo que se quedaron sin energía, lo que provocó que de un momento a otro ya no funcionara el suministro de oxígeno, causando la muerte de 17 pacientes, algunos de ellos que padecían Covid.
Y los socavones que se abren en cualquier punto del país también son tema de preocupación, pues en cualquier lugar esto podría suceder, aunque, a decir verdad, con la cantidad de baches que tenemos en la ciudad es como tener minisocavones.
También recuerde que hace sólo unos días las lluvias ocasionaron que amplias zonas de Nueva York y Nueve Jersey, en Estados Unidos, estuvieran prácticamente bajo el agua.
Ejemplos hay muchos: hace un par de meses Alemania vivió una horrible experiencia, pues las inundaciones causaron una estela de muerte y destrucción.
Grecia y Turquía, con sus incendios forestales, tuvieron que iniciar de cero su reconstrucción.
Aguascalientes no se queda atrás: las tormentas que azotan la ciudad, acompañadas muchas veces de granizo, además causan otras afectaciones: derrumbes, inundaciones, caída de árboles; en fin, todo lo que ocurre en la Entidad cada vez que llueve de forma copiosa.
Y párele de contar. Aquí surge la pregunta ¿será realmente obra de la madre naturaleza la devastación en todo el planeta? ¿no interviene la mano del hombre para acabarnos poco a poco el único lugar que tenemos para vivir?