La reforma eléctrica es una expropiación tal cual.
Lo que se está viviendo actualmente en el país en torno a la polémica reforma eléctrica, propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador, es para que se tomen medidas y decisiones contundentes, y la primera es no votar por ella.
Esta reforma es un previo a que México se convierta en Venezuela, traerá una pérdida enorme de dinero y oportunidades, además de romper con las alianzas dentro de los partidos políticos, pues es la primera reforma que manda el Presidente a esta legislatura.
Si esta, que es la primera, logra pasar una expropiación como la que se plantea, entonces no podemos imaginar qué pasará en su último año de gobierno, es realmente preocupante, declaró Juan Manuel Ávila Hernández, presidente de la Coparmex.
El líder empresarial hizo referencia a que si mañana el presidente Andrés Manuel dice que los coches se le hacen caros, podría proponer hacer una paraestatal, por lo que no se puede estar tomando decisiones tan importantes y de tanto peso sólo porque se le ocurren, y ahorita la posición que tiene el PRI es muy delicada, pues no hay consistencia en las declaraciones y sin duda se corre un gran riesgo.
Finalmente, reiteró que al hablar de una aprobación se está permitiendo una expropiación, en la que las afectaciones van más allá de los 100,000 millones de dólares, además continúa el riesgo de que en caso de aprobarse suban las tarifas y la producción de electricidad.