CIUDAD DE MÉXICO, (EL UNIVERSAL).- Travis Scott y Drake podrían pagar «miles de millones» en daños después de que se anunciara una demanda que involucraba a 68 personas de las más de 300 que resultaron heridas durante el concierto de Astroworld.
De acuerdo al abogado de Powerhouse Texas, Thomas J. Henry, quien es padre de la novia del cantante Liam Payne, Maya Henry, informó que, está siendo contactado por más personas afectadas, para demandar a los cantantes por negligencia.
«Cada vez más víctimas heridas se ponen en contacto con mi bufete por horas…Si bien todavía estamos trabajando para comprender el alcance total de la tragedia de Astroworld, creo que los daños sufridos por sus víctimas podrían ascender a miles de millones«, dijo el abogado de acuerdo a «Daily Mail».
Tanto a Drake como a Travis Scott se les acusa de incitar al caos, el cual tuvo como resultado que ocho personas fallecieran en el estadio NRG, Estados Unidos, el pasado viernes por la noche.
También se señala a Scott que continuó cantando como si nada cuando decenas de personas estaban quedando inconscientes durante su presentación y 11 de ellas sufrieron un paro cardiaco, al final más de 300 personas fueron trasladadas de emergencia a un hospital para recibir tratamiento.
Entre los denunciantes del bufete de abogados de Thomas, se encuentra Kristian Paredes, de 23 años, quien afirma que resultó herido gravemente durante el concierto del 5 de noviembre, y reclama más de un millón de dólares.
A estas denuncias se suman las del abogado Ben Crump, quien anunció que representa a varias víctimas y que ha presentado una denuncia en nombre de un joven de 21 años, Noah Gutiérrez.
Este último, según un comunicado del abogado, «describió escenas de caos y desesperación, durante las cuales él y otros asistentes al concierto que se hallaban en la zona VIP intentaron levantar del suelo a personas que pedían a gritos ayuda».
En total casi 50 mil personas se hallaban entre la muchedumbre que acudió al festival Astroworld. Más de 360 policías y 240 guardias velaban por la seguridad.