Hay cierta inquietud en algunos sectores de la sociedad en Aguascalientes, pues no son pocas las personas que buscan armarse ante la ola de violencia que azota al Estado.
Y sí, lamentablemente la población se está armando porque no se siente segura, porque ve que la delincuencia ya sobrepasó a las autoridades, y lo que es peor, éstas no lo aceptan.
Dicen que aquí no pasa nada, que lo malo ocurre en otros Estados, pero la verdad es que no se quiere reconocer la realidad palpable, que es que la violencia se anidó en nuestra sociedad.
Se supone que hay un proceso legal para hacerse de un arma, un permiso que se otorga después de cumplir varios requisitos, aunque también se puede obtener una pistola, por ejemplo, en el mercado negro.
¿Pruebas?: Crímenes a plena luz del día, asesinatos por incidentes viales, el que amenaza al enemigo, ¿y qué tal el jovencito que mató de una puñalada a otro en plena zona ferial? Eso señores, es el mercado negro, por lo que ya cualquiera porta un arma, aunque lamentablemente no es para defensa de la vida o del patrimonio, sino para hacer daño.
Y a quienes dudan de que armarse es un recurso exagerado, no perdamos de vista que en una sola jornada fueron capturados unos secuestradores, el mismo día en que también se registró un bancazo; al día siguiente se resolvió un feminicidio, y quien lo cometió, fue otra mujer. ¿Y qué hay de las demás ejecuciones y otros asesinatos?, esos no cuentan al parecer, y sí, los involucrados estaban armados.
Lo comentábamos en una entrega anterior, de una familia que fue víctima de la violencia, aunque afortunadamente no hubo consecuencias: viajaban un sábado por la tarde por la colonia Del Trabajo y su auto fue impactado por una bala perdida.
Además, agréguele los robos con violencia o sin ella, que no han sido pocos; esas y otras son las razones por lo que la población prefiere cuidarse a sí misma.
Pero no se quiere ver la paja en el ojo ajeno: en Estados Unidos, el país vecino, un día sí y el otro también hay incidentes donde están involucradas las armas, con la salvedad de que allá cualquiera las puede comprar en donde sea. Matanzas, sobre todo escolares, son las que han puesto al país del norte en el ojo público, porque ahí cualquiera está armado.
Ojalá las autoridades hagan su trabajo, pues para el común de la población no sería lo ideal armarse, ya que éste no es un recurso aconsejable cuando la mayoría de la gente no sabe cómo va a reaccionar en alguna situación de riesgo, y es por eso que se piden tantos requisitos para tener un arma en casa, pues el solicitante debería tener estabilidad mental, principalmente, porque dicen que las armas las maneja el diablo, es decir, se pueden utilizar en una ocasión que no lo amerite, con el resultado de una tragedia que podría ser peor.