La falta de personal médico, enfermería y de apoyo, así como de ciertos insumos, hace que el Hospital Hidalgo trabaje cuando mucho al 40% de su capacidad, pese a que la pandemia sigue activa y que no baja la demanda de servicio por parte de los usuarios locales y foráneos.
Esta situación provoca que estén cerrados varios pabellones de las áreas de encamados y la mayoría de las salas de quirófano, con lo que muchas de las cirugías que ocupan los pacientes no se llevan a cabo, se están reprogramando sin dar fecha o bien se están canalizando a otros hospitales del ISSEA, pero de igual manera la consulta externa o de especialidad también está restringida, al igual que los estudios de laboratorio, expusieron trabajadores del mismo hospital y familiares de pacientes a quienes se les ha pedido que se lleven a sus enfermos a otras unidades.
“Pese al enorme rezago que se tiene en la atención hospitalaria y en las cirugías programadas a causa de la pandemia, por increíble que parezca, pero solamente se trabaja en 4 de 12 salas de quirófano, por lo que la mayoría de las cirugías están siendo canceladas, reprogramadas para cuando hay oportunidad de llevarlas a cabo o bien se les pide a los pacientes y sus familiares que se vayan a otro hospital para que se les atienda, argumentando el asunto de la pandemia, cuando la realidad es que no hay personal”, expusieron empleados de las áreas médica, enfermería y de apoyo de la centenaria institución.
A su vez, usuarios de los servicios expusieron ante HIDROCÁLIDO que la atención para los pacientes ha decaído mucho debido esencialmente a que no hay los médicos y enfermeras suficientes, pero también porque se carece de material esencial de curación para atender a las personas que llegan a urgencias, ante lo cual se obliga a los familiares a andar buscando lo que se necesita de material y de medicamentos para que puedan ser atendidos los pacientes que llegan a urgencia o que requieren de atención hospitalaria.
Personal de las áreas médica, paramédica y de enfermería indicaron que lo más crítico dentro del Hospital Hidalgo es lo que está ocurriendo en las salas de operación, puesto que solamente una tercera parte de los quirófanos trabaja y el resto permanecen cerradas a piedra y lodo, “supuestamente por la pandemia, cuando la realidad es que no se utilizan porque no hay cirujanos ni el personal de apoyo que se ocupa para darle uso a las salas y atender la demanda de cirugías de todo tipo”.
Esta situación no es diferente a lo que sucede incluso en las áreas reconvertidas para la atención de la pandemia, toda vez que desde tiempo atrás se terminaron, y ya no se renovaron por falta de presupuesto, los contratos de muchos de los médicos, enfermeras y especialistas que estuvieron prestando sus servicios bajo esa modalidad, con lo que los más afectados son los trabajadores, por las fuertes cargas que se siguen teniendo, y los mismos usuarios, porque a muchos se les está canalizando a otros hospitales bajo el argumento de que el hospital está saturado, cuando la realidad resulta ser otra.