Suena a burla para el pueblo el que los diputados de Aguascalientes busquen aumentarse el sueldo ‘para no caer en tentaciones’ cuando mucha gente en este momento todavía trata de reponerse de los estragos económicos de la pandemia.
Éste sería un regalo navideño que ofende y lastima, sobre todo, a los menos favorecidos, pues la situación para un gran sector de la sociedad es apenas de sobrevivencia, aunque pareciera, por obvias razones, que en esta época decembrina el dinero y el trabajo no faltan.
La tentación, según los diputados, es que con más sueldo evitarían acceder o cometer actos de corrupción, por lo que la gente, indignada y con justa razón, ya está hastiada de que las cosas se hagan mal y perjudiquen a quienes sí las hacen bien.
Y por si fuera poco, regidores y la síndica del Ayuntamiento del municipio de Jesús María se autoasignaron un apoyo navideño de 200 mil pesos en efectivo, independiente a su aguinaldo y a los 10 mil pesos que reciben por mes para su gestión social.
Para esta cuestión sí pudieron dirimir sus diferencias políticas los regidores del PAN, MORENA, PES, PRD, PRI y Fuerza por México, y además se pusieron exigencias y determinaron que la tesorería municipal tiene que entregarles el dinero en efectivo, no en especie, para que puedan ejercerlo en ayudas sociales.
Obviamente esta decisión no gustó al alcalde panista que de plano se salió de la sesión donde se trató este punto y ahora está en dimes y diretes con el Cabildo que dice que no se autoasignaron los apoyos, sino que es para ayudar a la gente que, por otra parte, se da cita literalmente en todos los cabildos del Estado para solicitar ayuda, principalmente económica.
El que apoyen a la población por supuesto que no es malo, pues si la gente pide es porque lo necesita, pero también se sabe de casos en los que verdaderos vividores claman ayuda y hasta se dan el lujo de rechazarla en especie porque lo que quieren es cash.
Y a nivel federal mejor ni hablar, pues hace menos de un mes los diputados federales se dieron su regalazo navideño, donde por todo y por nada se autoasignaron compensaciones, ya que trabajan muy duro. Lo malo, dentro de su generosidad, es que el dinero que se reparten es del erario público. Sí, ése que usted y yo ganamos con nuestro trabajo diario.
Aquí surge la inconformidad, pues entonces se pensaría que para eso buscan llegar a esos puestos, no para beneficio colectivo sino para el propio.
Por eso el tema de la política siempre es polémico, no dudamos que haya mujeres y hombres con vocación de servicio que defiendan los intereses del pueblo, que es lo que los tiene ahí, pero al hacer cosas buenas que parecen malas se pierde todo el mérito.