CIUDAD DE MÉXICO (EL UNIVERSAL).- En fiestas decembrinas es muy común que veamos películas navideñas; sin embargo, pocas ocasiones alguna de ellas llega a sorprendernos. Es el caso de «Tokio Godfathers», que en México se conoció como «Héroes al rescate».
Esta película de anime se estrenó en el año 2003, fue dirigida por Satoshi Kon (1963-2010) uno de los directores más importantes del cine japonés y, aunque no es su obra más emblemática (por mucho sus fans prefieren a «Paprika» [2006] y «Perfect Blue» [1997]), sí es una cinta diferente que merece una oportunidad por parte de los espectadores. De hecho, de acuerdo con el sitio Rotten Tomatoes, la cinta tiene una calificación de 91 puntos de 100, y no es para menos.
La historia narra la travesía de una «familia» de indigentes que en plena Navidad se encuentran con una bebé abandonada en un tiradero de basura y cómo, gracias a las circunstancias y a las fechas decembrinas, hacen un análisis de sus propias vidas. El trabajo de Satoshi Kon dista mucho de ser fácil; por el contario, crea verdaderas obras maestras con historias complejas, thrillers psicológicos y personajes que contrastan con la sociedad nipona.
En Japón hay muchos temas que son considerados tabús y son poco abordados en los medios tradicionales en buena medida porque no son bien vistos en su sociedad y Tokio Godfathers conjunta a varios de ellos como son la gente sin hogar, la comunidad LGBT e incluso la propia religión. Vamos por partes.
Aunque el país del Sol naciente tiene una de las tasas más bajas de «homeless» (se estima que en todo Japón hay cerca de 5000 personas en situación de calle, de acuerdo con el Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar de Japón), es una realidad que existe, pero no se habla de ello pues los japoneses consideran esta situación como una deshonra a nivel nacional.
Los tres personajes principales de «Tokio Godfathers», Gin, Hana y Miyuki, viven en las calles después de fracasar en su vida profesional y personal; sin embargo, formaron una familia, viven dentro de una comunidad y forman lazos fuertes, como el caso de Gin y Hana, que asumen los roles de padres y con ello, dejan un poco de lado la invisibilidad a la que fueron arrojados.
En una parte de la película se muestra a este viejo alcohólico, a una mujer trans, a una chica que escapa de la justicia y a una bebé abandonada recreando la imagen del nacimiento de Jesús, y al igual que la escena bíblica, sus protagonistas son humildes y en cierta medida, marginados dentro de la sociedad.
Sobre la religión, en Japón la mayoría de su población practica el budismo y el sintoísmo y solo una pequeña parte el cristianismo. Resalta que esta producción animada se contextualice en Navidad, una de las celebraciones religiosas más importantes para una comunidad que apenas representa el 0.3% de un país con 125 millones de habitantes. Cabe recordar que los nipones tienen un oscuro pasaje de represión y exterminio de los cristianos durante los siglos XVI y XVII, cuando misioneros jesuitas fueron crucificados en el puerto de Nagasaki. Quizá por ello, Satoshi Kon eligió esa fecha, y ese momento para su película.
Finalmente y no por ello menos importante está el tema de la comunidad LGBT, que en esta historia está representada por Hana, una mujer trans que en sus mejores épocas fue una famosa drag queen. Ella es uno de los personajes más icónicos de la cinta no solo por su nobleza sino por las características psicológicas de este personaje.
Definitivamente, Tokio Godfathers es una película que vale la pena, no solo para Navidad, porque el trabajo realizado por Kon es mágico, único y diferente. Se puede ver por medio de plataformas como Netflix, Amazon Prime y Apple TV en su idioma original o con doblaje en español latino.
«Tokio Godfathers» («Heroes al rescate»)
Satoshi Kon
2003
1 h 32 minutos