Héctor Grijalva Tamayo, especialista en salud mental, urgió a las autoridades a darle la atención debida al problema lacerante de los suicidios, a fin de contener su alta incidencia que se deriva esencialmente de la violencia social y doméstica que se padece en Aguascalientes.
El fundador de las primeras unidades especializadas en la atención del suicidio en la Entidad, subrayó que es necesario que la prevención del suicidio tenga nuevos enfoques, ya que es preocupante la incidencia en jóvenes, adolescentes y hasta en niños, así como en personas de ambos sexos que están en plena etapa productiva.
En ese sentido y luego de calificar como “muy lamentable y preocupante” el hecho de que haya arrancado el año 2022 con una serie de suicidios y de intentos de suicidio (cinco consumados, uno más que podría consumarse en cualquier momento por el estado delicado de salud de una persona que atentó contra su vida y otro más que fue descolgado a tiempo), el doctor Grijalva sostuvo que la mejor manera de contrarrestar el suicidio es ampliar la atención a las familias.
Es importante desplegar un vasto programa de terapia familiar en el cual convivan los padres, los hermanos y los pacientes, además de que se propone que una de las áreas que se necesita crecer de manera importante es la de atención a sobrevivientes, que consiste en talleres de terapia grupal con aquellas personas que tuvieron un intento suicida y sobrevivieron.
Este trabajo, explicó el especialista, se hace conjuntamente con las personas cercanas, ya sea la pareja o los familiares, además de que también es importante considerar y reforzar la atención psicológica en línea porque a través de ella se podría llegar a más personas, sin que se deje de intensificar también el trabajo de la consulta en los centros especializados.
De la misma manera es fundamental fortalecer lo que viene siendo la salud mental comunitaria, así como los talleres para prevenir la violencia familiar y social, estrategia que debe ser llevada a más fábricas, sindicatos, centros comunitarios y grupos sociales, pues para poder frenar la incidencia de los suicidios se debe atacar de frente el problema de la violencia social y doméstica, insistió.
Grijalva Tamayo aseveró que el tamaño del problema del suicidio requiere de acciones y estrategias del mismo nivel o inclusive mayores, por lo que de hacerse ese esfuerzo seguramente habrá una contención del mismo.
“Quienes nos dedicamos a la prevención del suicidio confiamos en que este año habrá una relevante mejoría en lo que es la salud mental”, mencionó tras revelar que hay planes para crear unidades de tele-psicoterapia para la ciudad y zonas conurbadas, método que ya se ha probado desde hace más de 18 años y que ha mostrado ser eficaz.