CIUDAD DE MÉXICO (EL UNIVERSAL).- Estados Unidos y Chile enfrentaron una peor cuesta de enero que México, pero la pobreza en nuestro país es cuatro veces mayor que en ambas naciones.
Conocida como el impuesto de los pobres por dañar más a quienes menos tienen, la inflación alcanzó un nivel de 7.1% durante enero en México, reportó ayer el Inegi.
Por su parte, el Departamento del Trabajo de Estados Unidos informó esta mañana que la inflación llegó a 7.5% en ese país y significó la tasa más alta en cuatro décadas.
La última vez que la Unión Americana superó a México en inflación fue hace más de una década, en octubre de 2011, cuando la nación más poderosa del mundo sufrió una carestía de 3.5% y nuestro país de 3.2%.
Sin embargo, el impacto ha sido más duro en México, debido a que 43.9% de la población se encuentra en situación de pobreza, tasa cuatro veces mayor que del otro lado de la frontera norte, donde las carencias llegan a 11.4% de los estadounidenses.
Chile también superó a México en inflación durante el primer mes del año, pero reporta un nivel de pobreza de 10.9% y es la segunda menor tasa de América Latina, sólo detrás de Uruguay.
El país sudamericano enfrentó una inflación de 7.7% en enero y fue la más alta en 14 años, mientras nosotros sufrimos una carestía de 7.1%.
Para tratar de contener la inflación récord que vive Estados Unidos, la Reserva Federal (Fed) va a subir el próximo mes su principal tasa de interés, tras mantenerla en mínimos históricos de 0% a 0.25% anual desde marzo de 2020, así lo estima la mayoría de los propios integrantes de la institución.
La Fed es considerada el banco central más influyente del mundo, por lo que analistas esperan que el Banco de México (Banxico) siga sus pasos y aplique un incremento este jueves y varios más durante lo que resta del año, cuya principal tasa se ubica en 5.50%, luego de acumular un incremento de 1.25 puntos porcentuales durante 2021.
Por su parte, el Banco Central de Chile subió su tasa a 5.5% a finales del mes pasado para también buscar contener el llamado impuesto de los pobres.
Expertos consideran que Banxico se ha visto «tímido» frente a otros bancos centrales que actuaron el año pasado elevando sus tasas con mayor velocidad y magnitud para tratar de contener a la inflación y sus expectativas.