MONTERREY, NL. (EL UNIVERSAL).- Mientras la familia de Debanhi Escobar Bazaldúa, confía que esta semana haya novedades en las investigaciones, el lunes durante la tarde y noche, alrededor de 100 manifestantes exigieron justicia frente motel Nueva Castilla, donde la joven universitaria fue localizada sin vida en el fondo de una cisterna de unos cuatro metros de profundidad, el pasado jueves por la noche.
En ese contexto, el vicefiscal Luis Enrique Orozco Suárez, declaró en entrevista a un medio local, que en la citada fosa, fue localizado el teléfono celular de Debanhi Susana aunque no junto a su cuerpo, y que si bien la Fiscalía General de Justicia del Estado cuenta con personal calificado, dadas las dificultades técnicas por las afectaciones que haya sufrido el aparato al estar sumergido tanto tiempo en el agua, se auxiliarán de personal externo, para tratar de recuperar fotografías, posibles llamadas telefónicas o mensajes, que ayuden en las investigaciones.
Cabe mencionar que Mario Escobar, padre de la estudiante del tercer semestre de la Facultad de Derecho y Criminología de la UANL mencionó, tras confirmarse la muerte de su hija, que personal de la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas, cuyo titular es Rodolfo Salinas, mientras se realizaban los operativos de búsqueda en los que participaba la familia, le había dado esperanzas de que su hija se encontraba con vida, pues le aseguraron que por rastreo del gps de su celular, se evidenciaba movilidad en la zona.
La familia Escobar Bazaldúa, confió que con la intervención de las comisiones nacional y local de Derechos Humanos, y al haber atraído el caso la Fiscalía Especializada en Feminicidios y Delitos contra Mujeres, Adolescentes y Niñas, esta misma semana podrían lograrse avances en la investigación para esclarecer las causas de la muerte de su hija, además de deslindar responsabilidades, en relación con posibles negligencias en la búsqueda y las indagatorias, así como posibles acciones contra el o los probables responsables en su desaparición y feminicidio.
A diferencia de la marcha que unas dos mil personas realizaron el pasado viernes, por las avenidas Constitución y Morones Prieto, que llegó hasta las capillas donde eran velados los restos de Debanhi Susana, y culminó frente al Palacio de Gobierno, donde se concentró desde horas antes otro contingente, el lunes por la tarde y noche, solo unas 100 feministas exigieron justicia para la estudiante de leyes, frente al Motel Nueva Castilla.
Las manifestantes rechazaron que Debanhi haya muerto de forma accidental, e insistieron que fue asesinada; exigieron las renuncias del Fiscal General de Justicia, Gustavo Adolfo Guerrero y del Secretario de Seguridad, Aldo Fasci Zuazua, por su actuación negligente o de incompetencia, al grado que Fasci admitió que hubo una «falla humana masiva«, porque el cuerpo de la joven universitaria, no fue localizado en cuatro operativos previos realizados en el predio del motel mencionado.
Entre tanto, familiares de Yolanda Martínez, una joven de 26 años de edad, desaparecida desde el 31 de marzo, tras acudir a visitar a su abuela en la colonia Constituyentes de Querétaro, en San Nicolás de los Garza, no cesan en su búsqueda, acompañados por algunos vecinos.
Este martes por la tarde, realizarán una brigada de volanteo en la estación del Metro San Nicolás, para pedir que la población ayude en la búsqueda, proporcionando información que sea útil para localizar a la joven madre de familia, a quien espera además de su padre y sus hermanos, su pequeña hija de tres años.